Las bajas temperaturas que se registran desde hace dos semanas en buena parte del país, sumado a los pronósticos para el resto de la temporada, hacen presuponer que Argentina podría transitar uno de los inviernos más fríos de los últimos 60 años, desde que se hacen estas mediciones.
Si se toman en cuenta las temperaturas mínimas registradas apenas esta semana, entre -2 y -7,5°C, las zonas más afectadas son el norte de Buenos Aires, el sudeste de Córdoba y el sur de Santa Fe.
La advertencia fue planteada por la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), que en un comunicado señaló que las temperaturas bajas de este año podrían superar las registradas en el invierno de 2007, para ubicarse apenas por detrás del invierno más frío, registrado en 1984. La entidad mostró preocupación después de que las primeras heladas provocaran las pérdidas de miles de plántulas de trigo en las tres principales provincias productoras.
“Con un alto grado de probabilidad, los pronósticos prevén para lo que queda de este invierno que las temperaturas extremadamente bajas persistan durante la mayor parte de la estación en una amplia cobertura territorial. Este invierno podría superar las anomalías negativas de todo el invierno del 2007 y terminar siendo el segundo más frío de la historia documentada en Argentina (últimos 60 años), luego del récord de 1984″, expuso la BCR, que tomó al invierno de 2007 como el segundo más frío de los que se tienen registros, según publicó La Nación.
En nuestra provincia, la situación es parecida ya que el frío invernal dio paso a las heladas severas y ya se habla de su incidencia en el sector agrícola. “Tucumán experimenta hoy una helada sin precedentes, la más fuerte en la última década, de acuerdo con los expertos. Y es a causa de este fenómeno que el campo lo sufre”, explicó el presidente de la Sociedad Rural de Tucumán (SRT), José Frías Silva (h).
Pese a los riesgos que suponen las temperaturas extremas para los cultivos, desde la BCR esperan que “las bajas temperaturas de estos días actúen y reduzcan la población de esta plaga” y puso énfasis en la chicharrita del maíz, ya que “no resiste temperaturas menores de 4°C. Desde que comenzó julio, los valores mínimos estuvieron por debajo de ese registro. De esta manera, el frío de julio podría suavizar la caída del área maicera 2024/25″.