Hace unos días, la municipalidad de Iruya, uno de los pueblos más visitados de Salta, anunció el cobro de una "ecotasa" para ingresar al lugar. Este anuncio generó una gran polémica, llevando al intendente del lugar, Eugenio Herrera, a vetar la ordenanza. A continuación, te explicamos por qué dieron marcha atrás con esta medida.
La controversia de la ecotasa
La ecotasa propuesta implicaba un cobro de $2000 para argentinos, $4000 para extranjeros y $500 la hora de estacionamiento. La noticia se viralizó rápidamente y generó una ola de críticas por parte de turistas y operadores turísticos.
El principal argumento en contra de esta medida era el posible impacto negativo en la industria turística. Los operadores temían que estos costos adicionales desincentivaran las visitas al pintoresco pueblo, conocido por sus paisajes y su riqueza cultural.
Además, la medida era controversial porque la Constitución Nacional de Argentina, en su artículo 9, establece que "en todo el territorio de la Nación no habrá más aduanas que las nacionales", eliminando las aduanas interiores que existían antes de su sanción en 1853.
La respuesta del Intendente
Ante la reacción negativa, el intendente Eugenio Herrera decidió vetar la ordenanza. Sin embargo, Herrera justificó inicialmente la ecotasa, argumentando que los fondos recaudados se destinarían al embellecimiento del pueblo con fines turísticos, ya que no cuentan con suficientes recursos para hacerlo.
A pesar de la marcha atrás, la municipalidad busca alternativas para recaudar fondos. Insisten en cobrar una tasa de $3000 pesos a los automóviles y $5000 pesos a las combis turísticas por derecho de estacionamiento.
Cuáles son los destinos turísticos que cobran impuestos a los viajeros
El daño a los sitios históricos, el mal comportamiento de los turistas y el hacinamiento son consecuencias comunes del sobreturismo, un fenómeno creciente que ocurre cuando las visitas superan la capacidad disponible de cada lugar. Por este motivo, una lista cada vez más extensa de destinos turísticos populares que comenzaron a implementar un impuesto turístico con la idea de controlar el número de visitantes y garantizar la mejora de la infraestructura afectada por los viajeros.
Los 10 destinos que cobran impuesto a los turistas
Austria
Austria cobra a los visitantes un impuesto de alojamiento por noche que varía según la provincia. En Viena o Salzburgo, por ejemplo, se cobra hasta un 3,02% por persona sobre la factura del hotel.
Bélgica
Bélgica cobra una tarifa por noche a los viajeros, que algunos hoteles incluyen en la tarifa de la habitación y añaden por separado en la factura. Este impuesto se cobra por habitación y varía según el tamaño y la categoría del hotel, rondando los 7,50 euros.
Bután
El reino budista en el borde oriental del Himalaya triplicó la cantidad de impuestos que cobraba a los visitantes en 2023, imponiendo un mínimo de U$S 200 por día. En 2024, la tarifa diaria para la mayoría de los visitantes será de US$100 y continuará hasta el 31 de agosto de 2027.
Bulgaria
Bulgaria aplica una tasa a las pernoctaciones, que alcanza un máximo de solo 1,50 euros.
Islas del Caribe
Antigua y Barbuda, Aruba, Bahamas, Barbados, Bermuda, Bonaire, Islas Vírgenes Británicas, Islas Caimán, Dominica, República Dominicana, Granada, Haití, Jamaica, Montserrat, St. Kitts y Nevis, Santa Lucía, St. Maarten, San Vicente y las Granadinas, Trinidad y Tobago y las Islas Vírgenes de Estados Unidos cobran una tasa turística vinculada al costo del hotel que oscila entre los 13 y 45 euros.
Croacia
Croacia cobra una tarifa durante la temporada alta, de aproximadamente 1,33 euros por noche.
República Checa
El impuesto, de menos de un euro por persona y por noche, solo aplica a mayores de 18 años que viajen a Praga, la capital del país.
Francia
El “taxe de séjour” o impuesto turístico de Francia varía según la ciudad y suele agregarse a la factura del hotel, rondando entre 0,20 y 4 euros por persona y noche. París, la capital, anunció que aumentará su tarifa hasta en un 200% para quienes se hospedan en hoteles, Airbnbs y campings.
Alemania
Alemania cobra a los visitantes un “impuesto cultural” (kulturförderabgabe) y un “impuesto de alojamiento” en ciertas ciudades, incluidas Frankfurt, Hamburgo y Berlín, que suele rondar el 5% de la factura del hotel.
Grecia
El impuesto turístico de Grecia fue introducido por el Ministerio de Turismo y se basa en datos relacionados con la cantidad de estrellas del hotel y la cantidad de habitaciones alquiladas. El objetivo es ayudar a pagar la deuda del país y puede oscilar entre 4 euros por habitación.
Otros destinos con impuestos turísticos
Además de estos 10 destinos, otros importantes países de Europa y Asia, como Hungría, Islandia, Indonesia, Italia, Japón, Malasia, Nueva Zelanda, Países Bajos, Portugal, Eslovenia, España, Suiza y Tailandia también han comenzado a cobrar distintos tipos de impuestos extra, especialmente en las ciudades capitales, que suelen ser las más elegidas por los turistas.