Pese a las diversas especulaciones sobre su futuro, Lebron James continuará en Los Ángeles Lakers y cumplirá el último sueño de su extensa carrera: jugar con su hijo Bronny. Claro, el joven fue drafteado por la franquicia californiana por lo que ambos compartirán plantel en la próxima temporada.
Si bien Dallas había sido una de las franquicias interesadas y James era agente libre, el movimiento de los Lakers de contratar a su hijo lo hizo repensar su situación. Según informó The Athletic, James acordó un contrato de dos años por 104 millones de dólares. También tendrá una cláusula para evitar ser traspasado y otra que le permitirá salir tras finalizar la primera temporada.
Con esta renovación, el alero compartirá vestuario con su hijo, de 19 ños, que fue elegido en el Draft de la NBA en el puesto 55. Ambos serán la primera pareja de padre e hijo en jugar juntos en la NBA.
En la última temporada, Lebron promedió 25,7 puntos, 7,3 rebotes y 8,3 asistencias en 35 minutos por partido. También el alero tendrá el desafío de ir por la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de París 2024, donde compartirá plantel con Stephen Curry, Jayson Tatum y Kevin Durant.