La cicatrización de heridas es la tarea de las plaquetas. Se trata de células sanguíneas que ayudan a que la sangre coagule. Cuando nuestros niveles son bajos es posible que nos sintamos más cansados a la vez que las ampollas y manchas en la piel pueden hacerse más frecuentes. Existen remedios caseros que pueden ayudar a restaurar los trombocitos en nuestra sangre, como las infusiones.
Las plaquetas son componentes de la sangre imprescindibles para la coagulación. Sus bajos niveles pueden deberse a ciertas infecciones, enfermedades autoinmunes o incluso un embarazo. En estas ocasiones podemos sentirnos más cansados, a la vez que es posible encontrar hematomas y sangrados como el de la nariz o las encías.
¿Cómo podemos prevenir los bajos niveles de plaquetas?
Para prevenir esta afección es fundamental llevar a cabo un estilo de vida sano, que incluya cierta actividad física regular, horas de sueño suficientes, una alimentación saludable y niveles bajos de estrés. También para aumentar los niveles de nuestras plaquetas podemos acudir a ciertos remedios caseros como las infusiones.
Las infusiones son compañeras de todas las horas. De los desayunos como buena forma de despertar un cuerpo dormido, como un digestivo para luego del almuerzo o cena o para dedicarle su tiempo completo en la hora del té o la merienda. También han sido utilizadas por milenios como alivio para las enfermedades y ciertas afecciones.
En este caso podemos utilizar las infusiones como una estrategia para subir los niveles de las plaquetas. Es importante recordar que si se presentan síntomas como el sangrado excesivo, piel pálida o puntos rojos en la piel, se acuda a un médico antes de optar por estas bebidas naturales.
La infusión antiinflamatoria que puede prevenir además la baja de plaquetas
La cúrcuma es uno de los alimentos medicinales más conocidos, se trata de una planta herbácea que se asemeja al jengibre aunque esta raíz es más bien amarilla. En las aplicaciones terapéuticas esta ha sido utilizada por su capacidad antiinflamatoria debido a su principal molécula, la curcumina. Esta ayuda a prevenir enfermedades cardiovasculares y es conocida por su efecto capaz de aumentar los niveles de las plaquetas en sangre.
Para preparar el té de cúrcuma debemos hervir una cucharadita de la misma durante unos minutos. Luego debemos beberlo varias veces al día. También podemos incorporar otras infusiones, como es el caso del té de hoja de papaya y el ginseng que puede estimular la producción de plaquetas.