El equipo alternativo de la selección argentina no dejó ningún tipo de dudas
En la semana ya se hablaba de la ausencia de Lionel Messi y de un equipo alternativo contra Perú. Lionel Scaloni, que miró el partido desde uno de los palcos del estadio, sabía que era necesario ganar el último partido de la fase de grupos. Pero más allá del afán por terminar primeros, no había mucho sentido en arriesgar a los habituales titulares.
La Selección ganó con un doblete de Lautaro Martínez y si bien no se destacó en su totalidad hizo bien los deberes.
Sin contar a Messi, la principal novedad en el “11” titular fue la inclusión de Alejandro Garnacho. La “joya” se ubicó como extremo izquierdo e intentó ser la carta desequilibrante del equipo conducido por Walter Samuel. A pesar de que se mostró movedizo en ataque y hasta colaboró en defensa, el delantero que brilla en Manchester United, no logró destacar en ataque, su principal fuerte, y terminó siendo reemplazado en el complemento por Nicolás González.
Por el lado derecho estaba el inoxidable Ángel Di María. El extremo abandonó su tarea de velocidad por las bandas y atacó por el medio de la defensa peruana, la cual estuvo llena de falencias. Con su tradicional amague hacia dentro y el disparo rasante, “Fideo” terminó de marcar la diferencia con una increíble asistencia a Martínez.
“Toro” se lució con un doblete y lleva cuatro goles en tres partidos; números muy positivos y un llamado de atención para su DT, ya que lo posiciona bien en la carrera por la titularidad de cara a lo que se viene.
Esos avances en el ataque de la “albiceleste” no hubieran sido posible sin la conexión en el medio campo. Scaloni repitió la mitad de la cancha que había utilizado en su debut como DT de la Selección en 2018 y eso le salió a la perfección. A pesar de que se extrañó la garra de Rodrigo De Paul, Leandro Paredes (estuvo cerca de convertir de tiro libre y erró un penal), Exequiel Palacios y Giovani Lo Celso no tuvieron inconvenientes en la distribución de los pases.
Además, la defensa casi no pasó sobresaltos (Perú sólo tuvo dos remates). Emiliano “Dibu” Martínez estuvo protegido por el tándem de Germán Pezzella-Nicolás Otamendi y por los laterales Gonzalo Montiel y Nicolás Tagliafico, quienes pasaron al ataque para generar superpoblación en la zona cercana al área de Pedro Gallese.
Sin el astro rosarino, el entrenador apostó por un esquema 4-4-2. Con ese plan, la prioridad fue explotar las bandas (en donde también sumó minutos Valentín Carboni). Sin embargo, a diferencia de lo pensado, el mayor peligro llegó por el medio.
El próximo desafío será en cuartos de final y ahí, casi con seguridad volverá a aparecer el equipo que sale de memoria. Eso sí; Scaloni puede estar tranquilo porque el alternativo dio buenas señales y dejó en claro que los futbolistas que habitualmente no juegan pueden aportar lo suyo en cualquier momento.