Después de seis meses de dilaciones, debates truncos y negociaciones interminables, el gobierno de Javier Milei acaricia la sanción definitiva de la ley Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los Argentinos. Con el respaldo de la oposición dialoguista, La Libertad Avanza (LLA) espera obtener hoy el primer triunfo parlamentario importante con una mixtura entre las correcciones que el Senado le realizó y las insistencias pretendidas por la Casa Rosada.
Después de las últimas reuniones en búsqueda de consensos para redactar el dictamen final, los representantes de la bancada oficialista en la Cámara de Diputados aseguran que “la ley está”. De hecho, en el conteo previo a la sesión que iniciará a las 12, el Gobierno asegura reunir 129 votos que le permiten aprobar ambas leyes. La sesión será larga, y no descartan que el debate pueda extenderse hasta las primeras horas del viernes porque suponen que uno de los objetivos de Unión por la Patria (UxP) será dilatar la discusión.
De acuerdo a lo acordado en el plenario de comisiones la Ley Bases se vota toda junta y las Medidas Fiscales Paliativas y Relevantes (paquete fiscal), separadas las insistencias (gastos tributarios, ganancias y bienes personales).
¿Se desinfla la oposición?
Partiendo del análisis de lo sucedido en el Senado con el Régimen Impositivo de Grandes Inversiones (RIGI), donde la unidad del kirchnerismo se quebró a partir de los votos afirmativos de Guillermo Andrada (Catamarca), Carolina Moisés (Jujuy) y la representante local Sandra Mendoza, en los pasillos del Congreso entienden que el peronismo puede llegar a sufrir la fuga de algunos votos. También son conscientes que como el texto se votará de manera conjunta esto puede complicar el acompañamiento. En la primera votación en Diputados, el bloque de UxP sufrió la fuga de seis votos que terminaron siendo fundamentales para La Libertad Avanza. Sin esos votos, el régimen se caía porque no alcanzaba las 129 adhesiones necesarias.
Poroteo reñido
Uno de los principales puntos de conflicto surgirá en el paquete fiscal con el debate de modificaciones al Impuesto a las Ganancias y la restitución de la cuarta categoría. Hasta el martes, el Gobierno tenía los votos justos para recuperar el capítulo que genera expectativas en un grupo variopinto de gobernadores y en el equipo económico de la gestión libertaria. En el Senado, ese tema fue descartado por el peso que tienen los representantes patagónicos más el bloque de UxP que cuenta con 33 votos. La medida, de aprobarse, ampliará el universo de trabajadores alcanzados y pasarían de 200.000 a casi 1.200.000 empleados en relación de dependencia que superan los mínimos imponibles de $1,8 millones para solteros y $2,3 millones para casados. El oficialismo y sus aliados son cautos en este tema porque entienden que pueden aparecer votos peronistas y eso sería determinante.
En la primera edición del debate en Diputados, la votación fue una de las más reñidas de las más de 40 que se hicieron. En esa ocasión, por la positiva hubo 132 diputados, mientras que por el rechazo lo hicieron 113, con cuatro abstenciones y siete ausencias.
En las filas de LLA, saben que esta votación será la madre de las batallas porque más allá de aprobar las dos leyes, un resultado adverso en este tema terminará siendo un titular negativo de alto impacto para el Ejecutivo.
En Bienes Personales la situación es igualmente reñida, pero con algunas preocupaciones más luego de que el gobernador de Santa Fe, Maximiliano Pullaro, dijera que no acompaña el cambio en la norma y que sus cinco diputados votarán en contra. En abril la propuesta recibió 142 votos a favor.
La reforma de Bienes Personales aprobada en Diputados, pero rechazada en el Senado, aumenta los pisos imponibles a $100 millones y a $350 millones para viviendas familiares y propone un plan de pago a cinco años, para garantizar estabilidad fiscal por diez años.
No se avizoran cambios
En lo que respecta a la performance que pueden tener los diputados nacionales por Tucumán en el recinto, se espera que mantengan la conducta expresada en abril cuando las Bases obtuvieron 142 votos afirmativas, 106 rechazos y cinco abstenciones. En aquella oportunidad, los representantes tucumanos en Diputados se distinguieron por la negativa de los dos referentes de UxP, Pablo Yedlin y Carlos Cisneros, y por los votos positivos de Gerardo Huesen (Fuerza Republicana), Roberto Sánchez (Unión Cívica Radical), Mariano Campero (UCR), Agustín Fernández, Gladys Medina, Elia Fernández (bloque Independencia) y Paula Omodeo (CREO).