San Pablo se convirtió este martes en la primera localidad donde se instalaron los últimos dispositivos tecnológicos como parte de un programa que procura disminuir el número de delitos en el interior de la provincia, en colaboración con la Policía. En conjunto, 41 motocicletas recuperadas en procedimientos realizados por la Policía Vial y la Secretaría de Transporte fueron entregadas en el acto que contó con la participación del gobernador Osvaldo Jaldo y el ministro del Interior Darío Monteros.
“Es un esfuerzo para el que estamos preparados como Gobierno poner en funcionamiento este nuevo centro de monitoreo para los vecinos de San Pablo”, dijo el gobernador. Y agregó: “Queremos agradecer a los vigías comunales que van a hacer un trabajo articulado con la Policía. La tecnología avanza, pero también el delito. He dado instrucciones para que este centro esté comunicado con el 911”.
La planificación, a cargo del Ministerio del Interior, cuenta con apoyo del gobernador Jaldo como parte de una impronta de la nueva gestión: “La seguridad la hacemos entre todos”
En San Pablo, donde existían cinco cámaras y un domo, el nuevo equipo contará con un servidor de más de 300 canales y un nuevo software de vigilancia que modificará el monitoreo con 18 dispositivos en los ingresos a la ciudad, los principales paseos públicos y las arterias con mayor circulación de vehículos. Los domos PTZ (Pan, Tilt y Zoom en sus siglas en inglés: panorámica, inclinación y zoom) logran imágenes en plano horizontal y vertical y pueden adecuar la lente hasta conseguir el registro de un objeto específico hasta a 400 metros de distancia. Otra modificación significativa será el cambio de horarios de relevamiento y vigilancia ya que el nuevo programa contempla la prestación de servicios durante las 24 horas y la vinculación del Centro de Monitoreo para trabajar de forma directa con la policía de la provincia. La planificación contempla la implementación de tecnología de manera progresiva en cada una de las 93 comunas del interior.
“El personal técnico visitó el lugar y tomó nota de las falencias para optimizar el servicio. Creemos que debe darse un cambio de visión para adaptarse a los índices y parámetros actuales para coadyuvar con otras áreas institucionales de seguridad. El tipo de delito al que nos enfrentamos no es el mismo del que veíamos hace 10 años y todos debemos ayudar”, advirtió Monteros.
La modificación también contempla un período de capacitación específico para el manejo de los nuevos equipos que serían operados por un personal específico a designarse, según indicó el equipo de tecnología de la cartera que trabaja en el proyecto.
“Estamos trabajando con la comunidad. Hemos escuchado varias propuestas para adaptar la funcionalidad de un nuevo centro de monitoreo y priorizamos la innovación tecnológica para optimizar el desempeño de nuevos profesionales en las diferentes comunas. Entendemos que es el primer punto de un cambio importante en diferentes localidades de la provincia”, adelantó Monteros.
El programa contempla varias fases y su puntapié inicial es el moderno espacio que se acaba de poner en funcionamiento.