El Senado de la Nación comenzará a tratar la semana próxima en el ámbito de las comisiones los proyectos de Ley Bases y de reforma fiscal, sobre la base de la media sanción por parte de Diputados. Por eso, en la Cámara alta ya se activó el “poroteo” preliminar para tratar de adivinar qué futuro le depara al paquete de propuestas impulsado por el gobierno de Javier Milei.
Este jueves por la noche, el cuerpo presidido por Victoria Villarruel recibió la versión definitiva de la iniciativa girada desde la Cámara baja. La intención del oficialismo es que la votación se concrete antes del 25 de mayo, cuando el líder de La Libertad Avanza (LLA) espera firmar un pacto estratégico con los gobernadores, en un encuentro que se llevará adelante en Córdoba. Y lo que defina el Congreso será clave para la cita convocada por Milei.
Con 33 bancas sobre un total de 72, el bloque de Unión por la Patria (UxP) está sólo a cuatro escaños del quórum propio en el Senado. Estos números a su vez dejan poco margen de error al oficialismo: en caso de no prosperar las negociaciones con sus pares del PJ, los armadores de LLA quedarán forzados a tratar de asegurarse el apoyo de los 39 miembros restantes para buscar la aprobación de las reformas que pretende Milei, evitando así tanto un posible rechazo como un eventual regreso a Diputados.
Más allá del reparto de fuerzas en el cuerpo que preside Villarruel, en el propio justicialismo reconocen que los libertarios mejoraron la estrategia de negociación respecto a la anterior experiencia con la Ley Bases. Muchos incluso advierten el rol clave que está desempeñando el ministro del Interior, Guillermo Francos, en la tarea de sumar adhesiones de los gobernadores -de hecho, el mandatario tucumano Osvaldo Jaldo estuvo reunido con él esta semana-, teniendo en cuenta que, en rigor, los senadores son los representantes de las provincias en el Congreso de la Nación.
Las versiones indican que este jueves hubo una reunión vía Zoom de los miembros de UxP, y si bien la próxima semana volverán a conversar para definir una estrategia, la sensación que les dejó la charla es que “los números están” y son suficientes para rechazar la Ley Bases.
¿Qué harán los dos senadores tucumanos del peronismo, Juan Manzur y Sandra Mendoza? Ni el ex gobernador y ni la esposa del intendente de Famaillá, José “Mellizo”Orellana, adelantaron sus posturas hasta el momento.
Por el lado de Manzur, más allá del efecto que pueda tener un eventual pedido de Jaldo, lo cierto es que ocupa un rol clave en el peronismo nacional, y este dato puede ser decisivo al momento de votar. Tras la licencia que tomó en marzo el presidente del PJ, Alberto Fernández, los cinco vicepresidentes -entre ellos, Manzur- asumieron en forma conjunta las riendas del justicialismo. A ello se suman otras aristas, como la cercanía del ex mandatario con los líderes de la CGT y su posicionamiento como una figura que podría disputar el centro de la escena política nacional, siempre y cuando el gobierno libertario no consiga la reactivación económica que pretende para el segundo semestre de 2024.
En cuanto a Mendoza, su voto también puede estar sujeto a lo que defina la bancada peronista del Senado. De todos modos, en el espacio de la famaillense advierten que los armadores libertarios “no se duermen” a la hora de buscar aliados, y con la votación en Diputados ya se evidenció que hubo un cambio en la postura para negociar con las bancadas rivales. Otro factor que puede influir es que el orellanismo dio muestras en el pasado de que, más allá de su pertenencia peronista, también se “plantó” ante los mandatos de la conducción en caso de considerarlo necesario, como cuando rompió con el alperovichismo en 2014. Al margen de este antecedente, tanto Jaldo como Mendoza reconocieron en distintas entrevistas recientes que hay buen diálogo entre ellos. Así, en el “poroteo” que hacen en el Senado, la posición de la famaillense figura todavía en el lote de quienes están “en duda”, junto a -por ejemplo- la salteña Nora Giménez.
Mientras las expectativas se posan en lo que suceda en UxP, la representante tucumana por la minoría, Beatriz Ávila (bloque por la Justicia Social) anticipó en una entrevista con LA GACETA Central, el noticiero de LG Play, que dará su visto bueno a las medidas impulsadas por el jefe de Estado. “Los senadores representamos a las provincias, y hay que apoyar no sólo para brindar las herramientas al Poder Ejecutivo Nacional, sino sobre todo, para tener los recursos necesarios para Tucumán”, enfatizó la referente del PJS. Remarcó a modo de ejemplo que, en caso de un rechazo a la iniciativa, los tributos que dejaría de percibir la provincia serían equivalentes “a dos planillas salariales”. “No he tenido contacto (con Manzur y con Mendoza), pero aspiro a que el Senado esté a la altura de las circunstancias”, planteó.
Ávila participará de las discusiones de la semana próxima, ya que integra la comisión de Legislación General, y junto a sus pares de Presupuesto y de Asuntos Constitucionales, firmará el dictamen que llegará al recinto. A su criterio, tanto las reformas de la Ley Bases como el paquete fiscal contienen puntos favorables, más allá de que todavía queden asuntos pendientes de debate. “Debemos dejar de lado las diferencias ideológicas, partidarias e incluso personales”, señaló.