Cómo se resolvieron otros cuatro casos similares al de los futbolistas de Vélez

En los últimos tiempos hubo otros casos similares o más polémicos que el de los jugadores de Vélez. Causas en la que el “no es no” también estuvo presente, pero tuvieron un desarrollo diferente. La mayoría de las víctimas sí aceptaron entregar los celulares y sólo uno de los acusados quedó privado de su libertad mientras duró el proceso.

Si se trata de repercusión nacional, este caso puede ser considerado similar a la causa en la que está acusado José Jorge Alperovich. Fue denunciado por abuso sexual por una allegada. El ex gobernador negó todo. La víctima, cuando se lo pidieron, entregó el celular para que fuera analizado. El ex titular del PE, que está siendo enjuiciado, siguió el proceso en libertad.

El lunes, dos hermanos fueron condenados a 10 años de prisión por haber abusado de una joven cuando fueron hasta su casa. Tanto la víctima como los denunciados entregaron sus móviles para que fueran peritados. Los acusados nunca perdieron su libertad en todo el proceso y recién después de que fueran penados, se les ordenó el arresto domiciliario hasta tanto la sentencia quede firme. La joven estudiante universitaria transitó los caminos procesales durante dos años hasta que hubo un fallo. “Fue muy difícil porque sentía que estaba obligada a demostrar que no mentía”, señaló en una entrevista con LA GACETA.

Aunque en este caso el delito que se investiga es de abuso simple, la víctima que es empleada judicial se negó a facilitar su celular porque adujo tener información vinculada a su trabajo. La fiscala Adriana Reinoso Cuello, que instruye en la causa de los jugadores de Vélez, no insistió porque ya lo había entregado el acusado (que nunca estuvo en un calabozo) y sólo necesitaba constatar los mensajes que se habían enviado entre ellos.

El último expediente abierto es el de la participante de Gran House Tucumán. Al señalado se le dictó la prisión preventiva por 30 días con solo conocer el resultado del informe del médico forense donde comprobó la existencia de lesiones compatibles con abuso sexual. La víctima, antes de ser entrevistada facilitó el móvil para que fuera peritado.