Por Nicolás Sánchez Picón
17 Abril 2024
“Tenéis voces muy bonitas, deberíais cantar juntos, como los Carpenters”, les decía incansablemente su madre María Engracia. Ella no tenía visión de productora, sólo quería que sus hijos se acompañaran. Con el tiempo y con la fórmula correcta, le hicieron caso. Aquellos jóvenes cumplieron los deseos de su progenitora y los anhelos que ellos mismos conservaban de su niñez. Así, Pimpinela conquistó el mundo; con su música, los hermanos pisaron los mejores escenarios y consiguieron logros que para los argentinos eran imposibles. ¿La clave? La unidad, esa que tanto pedía Engracia. Y esa simbiosis es la que celebran este jueves a la noche en el Club Sportivo Floresta.
“Siempre juntos” es el nombre del nuevo espectáculo con el que Lucía y Joaquín Galán recorren este 2024 el globo. Ya lo presentaron en México, en Estados Unidos y en Chile; con él, pronto partirán a otra decena de países. Por primera vez, además, llegarán a ciudades como Zurich, lugar en el que jamás habían cantado. Pero, antes, vienen a la provincia, donde -admiten- son locales. “Lo que vivimos en Tucumán es alucinante”, dijeron en su última entrevista a este medio. Se presentaron aquí por primera vez en 1983; la provincia fue la primera del interior en acoger su música y su estilo. Desde allí, no pararon. Y en cada ocasión, el romance entre los tucumanos y Pimpinela se renueva.
“‘Siempre juntos’ tiene que ver con Lucía y conmigo, y con el público... han pasado 40 años y seguimos, siempre juntos. Es el festejo de un sueño que empezó con nuestra familia, antes que nosotros naciéramos. Sabemos que no es habitual que dos hermanos tengan toda una vida juntos, y menos que el público acompañe tanto tiempo. No todos tienen el privilegio de que su música se transmita de generación en generación”, dice, desde su casa en Buenos Aires, Joaquín a LA GACETA.
Éxitos y sorpresas
Este show es un homenaje y un agradecimiento, advierte el 50% del dúo. “Es un repaso por muchos de los temas con los que hemos crecido juntos. Hay éxitos, los infaltables, como “A esa”, “Valiente”, “Olvídame y pega la vuelta” o “El amor no se puede olvidar”, y también aprovechamos la ocasión para agregar algunas canciones de nuestras favoritas, de esas que quedaron sueltas en los discos y que no tuvieron tanta repercusión”, asegura y sorprende a este periodista, conocedor de la vasta discografía del dúo. “Como dice Mirtha Legrand, ‘el público se renueva’, entonces siempre tenemos una base de temas que no podemos quitar. Pero, después, vamos sumando algunas de nuestras favoritas -relata-; cuando sacás un disco, siempre hay dos o tres temas que son del estilo del artista, que sabés que el público va a seguir. Y también están esas otras canciones que grabás porque te gustan, más allá de que puedan ser éxito o no. Algunas de esas traemos en esta gira”.
Es que, claramente, no debe ser fácil escoger entre 300 canciones para un concierto de dos horas, y menos con un público que se renueva. En los últimos años, las primeras filas de sus conciertos en la provincia están copadas por jóvenes. “Eso es algo que te impulsa mucho; sabemos que muchos de ellos son una continuación de sus familias, y que otros son atraídos por las canciones nuevas. No importa el por qué, le damos mucho valor; somos muy conscientes de ello y nos entusiasma. Sí, tenemos un enorme cariño por nuestra gente contemporánea, pero también nos emociona mucho y nos sorprenden las nuevas generaciones”, reflexiona.
Para los contemporáneos, las mayores sorpresas, que Joaquín permite spoilear: además de los éxitos, algunas “joyitas musicales” como “Mi vida” o “El cuento de nunca acabar” están listas para emocionar esta noche a los tucumanos.
Espíritu de conquista
Hace poco tiempo los hermanos festejaron cuatro décadas de carrera, pero la edad no les preocupa y la fatiga no los doblega. Confirman sentirse con las mismas ganas que al principio. “Todo esto es gracias al público que nos sigue, y que evidentemente es muy lúdico; tiene una imaginación y una apertura mental o espiritual muy grande. En el escenario, nosotros nos olvidamos que somos hermanos cuando cantamos, y el público también. Eso, los personajes que encaramos, nos ayuda a aferrarnos a las canciones... y sí, las giras son largas, y el cansancio sí se siente, pero la teatralización nos ayuda y el público nos sostiene”, considera.
Cantaron hasta en el Madison Square Garden e incluso se animaron a llevar su concierto a África. “El público estaba dividido en dos, las mujeres de un lado y los hombres del otro. ¡Pensé que me iban a matar al verme gritándole a un hombre!, pero queríamos saber qué pasaba con nuestra música”, dijo en alguna ocasión Lucía, sobre esa situación vivida hace décadas. Aún hoy buscan sorprenderse con nuevas experiencias. “Varias veces nos han sugerido hacer giras por Europa (fuera de España, donde también son locales), pero se tienen que combinar muchos factores. En noviembre, iremos a Milán, a Londres y a Zurich. Somos hijos de inmigrantes españoles y mantenemos ese espíritu de conquista, ese afán de probar algo nuevo. Siempre nos gustaron los desafíos, y hoy los vamos dosificando -reflexiona-; somos conscientes de nuestra edad, pero creemos que es una actitud. Sí, hay una parte biológica y física que corre con el tiempo, pero lo que más nos impulsa es el público, el seguir yendo a Tucumán o a Miami y que haya gente entusiasmada por vernos. Eso te estimula mucho. Sabemos que hay algo finito, pero mientras tengamos salud seguiremos cantando. El retiro no es algo que estemos pensando, porque el pensamiento te lleva a concretar”.
Nuevos proyectos
En los últimos años Pimpinela ha entrado de lleno a las nuevas generaciones con canciones como “Traición”, y han enloquecido a sus fanáticos más fieles con “Cuando lo veo” y “Lloro” (ambas con Benjamín Vicuña como protagonista de los videoclips). Y en esa misma línea están trabajando para este año -adelanta él-. “Tenemos una canción en proceso con una historia que está buena... Estamos muy abocados a eso; ya no se estila como antes a sacar un disco, sino a singles, entonces nos gusta poder prepararlos; tener una buena canción, con una buena historia y con un buen director. Que es algo que siempre hicimos, en realidad... como cuando en 1985 grabamos con Dyango”, relata. También asegura que sigue en proceso la biopic del dúo. “Siempre estamos recibiendo propuestas para la serie, de hecho hay ya un equipo en España trabajando, pero somos muy exigentes. Queremos contar nuestra historia, una que está hecha en Argentina, en España y en América, en general... y eso es difícil de llevar a cabo”, asegura.
Por lo pronto, sus fanáticos (ya con entrada, pues están agotadas) podrán acercarse este jueves a vivir una noche inolvidable en el Club Floresta, a las 21.
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