Fue el último refuerzo en llegar, debutó con un gol y hoy es pieza clave de San Martín de Tucumán

Lautaro Fedele fue el último refuerzo en llegar a San Martín. Con el campeonato iniciado, el extremo llegó a Tucumán y no tardó en ganarse un lugar dentro del “11” de Diego Flores. Incluso, se dio el lujo de marcar su primer gol con la roja y blanca en su debut frente a Deportivo Maipú. Ahora, el delantero de 22 años asegura que el “santo” debe continuar a paso firme para seguir ligado a la parte alta.

“No podemos regalar nada. Este es un campeonato complicadísimo en el que tenes que ir partido a partido”, indicó el delantero, que ya suma 530 minutos en nueve partidos –seis titularidades-; números que dejan en claro que se presenta como una pieza importante para el esquema del DT. “Cada partido que pasa me siento con más confianza dentro de la cancha. Siento que el entrenador está confiando en mí y yo trató de responderle”, dijo.

En este sentido, Fedele comentó que logró crecer en su juego gracias a algunas charlas que tuvo con Gonzalo Bettini, jugador con el que comparte la banda derecha. “’Gonza’ me aconseja mucho dentro y fuera de la cancha. Eso es importante porque él es un jugador con experiencia y siento que escuchar a los más grandes me va ayudar a ser mejor jugador”, señaló.

En relación a su tardía llegada a Tucumán, Fedele recordó que jugó dos partidos en el inicio de la temporada con Defensa y Justicia. Esta situación hizo que, por un momento, dudé de la posibilidad de cambiar de aires. “Ya teníamos todo arreglado y justo empecé a sumar minutos. Pero, cuando ya cerraba el mercado de pases, me volvieron a llamar y directamente me vine a San Martín”, recordó sobre cómo se inició su segunda experiencia fuera de Buenos Aires.

El extremo dijo que cambiar el lugar de origen hace que desarrolles nuevas habilidades en la cotidianidad. “Me acuerdo que cuando jugaba en Dorados de México, no sabía nada de cocina y me costó horrores cocinar. Hoy ya lo manejo y, si bien no es algo que me guste, lo llevo mucho mejor”, describió Fedele, que ya tiene en claro cuál es su especialidad culinaria. “Cuando invitó a comer a alguien voy a la típica: milanesa con fideos y con queso arriba. Con eso, ya estamos. Pero la comida que más extraño son los fideos con tuco que me hace mi vieja. Los míos salen sin sabor, jajaja”, añadió.

Pese a la distancia que separa Berazategui de Tucumán, el ex Defensa valora el esfuerzo que realiza su familia para estar presente en cada partido. “Cuando jugamos en Buenos Aires, siempre van. Mi vieja y mi hermanita ya vinieron a Tucumán y conocieron La Ciudadela. A ellas les pareció una locura porque la cancha siempre está explotada y llena”, dijo el extremo.

Según el relato de Fedele, el apoyo del hincha se vuelve una motivación extra para afrontar cada partido. “El hincha siempre me saluda y me trata con mucho respeto en la calle. Eso es algo que me gusta mucho”, señaló. 

Instalado en el Hotel Bono Central de San Juan, el ex Defensa y Justicia reveló que Leonardo Monje es su compañero de habitación y con quien pasa gran parte del tiempo. “Es uno de los primeros jugadores con los que empecé hablar. En las concentraciones él duerme un montón y siempre tomamos mate. Hacemos casi todo juntos”, comentó.

Si bien existe una competencia natural por el puesto, Fedele comentó que generó una gran relación con Gonzalo Rodríguez. En concreto, el experimentado jugador fue uno de los primeros que lo incluyó al grupo. “Con 'Turbo' me llevo muy bien. Desde que llegué, me recibió de una gran manera. Es más, como yo no tenía cómo movilizarme y él me traía a entrenar en los primeros días. Compartimos mucho y por eso le tengo gran aprecio”, dijo el extremo.

También valoró la calidez humana que hay dentro del plantel. “Somos un grupo muy unido. Compartimos muchas cosas. Eso es importante para lograr grandes cosas”, puntualizó.

A modo de ejemplo citó la gran relación que mantiene con Diego Mastrángelo. “Con él nos molestamos mucho. Pasa que tenemos casi la misma edad y nos conocíamos de varios enfrentamientos en Reserva. Incluso, en una de las concentraciones, llegamos a la final de un torneo de truco. Pero nunca se jugó porque se habían suspendido la semis en las que estaban ‘Pepe’ (Sand) y ‘Nico’ (Carrizo) contra (Iván) Molinas y ‘Mati’ García”, contó Fedele, que comparte gustos musicales con el defensor. “Diego tiene un buen mix de música. A mí me gusta mucho el reggaetón. Pero, cuando ponen electrónica, no me gusta pero es lo que hay, ja”.

En relación a su vida fuera del campo, el extremo dijo que ya tiene un hobby preferido para pasar el tiempo. “Después de los entrenamientos siempre duermo una siesta. Pero en mis tiempos libres, aprovechó para jugar a la computadora. Me gusta mucho el Counter Strike porque es un juego que siempre disfruté desde chiquito. Me acuerdo que teníamos que ir al ciber para poder conectarnos con mis amigos”, dijo. “Todavía no jugamos con Molinas, pero me dijo que juguemos juntos. Seguramente en estos días lo vamos a hacer”, agregó.

Así, Fedele disfruta de su estadía en San Martín. Además de aprovechar el envión de resultados para seguir en la parte alta de la zona “A”. El extremo tiene plena confianza en que el plantel está dispuesto a hacer historia y él quiere aportar su “granito de arena” a la causa.