Tras las sanciones impuestas por fallas en la prestación del servicio, el Gobierno y la Empresa de Distribución de Electricidad de Tucumán (EDET) comenzaron a analizar la actualización de las tarifas. Particularmente, la compañía planteó la necesidad de aplicar el pase directo del costo de la generación a la boleta que reciben los usuarios, un mecanismo conocido como “pass through”. El debate parte de la base que, hasta la fecha, están pendientes dos actualizaciones y que, frente a esa situación, la distribuidora viene acumulando una deuda con la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico SA (Cammesa).
Mientras tanto, el Gobierno nacional busca cómo saldar las obligaciones que se acumulan todos los meses con el sistema eléctrico, que rondarían los U$S 2.000 millones. El Poder Ejecutivo debería cubrir con transferencias la diferencia que hay entre el costo de generación de la energía y el que pagan efectivamente los usuarios, pero no lo está haciendo. Esos envíos deberían girarse a Cammesa, la empresa que administra el suministro mayorista eléctrico y con las productoras de gas, a través de programas de subsidio como el Plan Gas.
Las autoridades de EDET plantearon el cuadro de situación ante el ministro de Economía y Producción, Daniel Abad. En ese sentido, expusieron que la boleta que les llega de la generadora subió de unos $ 3.800 millones a casi $ 10.000 millones. Además, el costo operativo de la distribuidora está por debajo de ese monto, estimado en unos $ 8.000 millones. Los reajustes para esta cuestión corren por cuenta separada y se negocian a través de la actualización del Valor Agregado de Distribución (VAD). El último aumento autorizado en este ítem ha sido dado en septiembre del año pasado.
¿Cómo sería?
La compañía solicita ahora que el reajuste por el pase directo de los costos a Cammesa sea de inmediato, de tal manera de no seguir acumulando compromisos con la compra de la energía. Según trascendió, el primer “pass through” implicaría un impacto en la factura del 78%. Abad, en ese sentido, pidió a los ejecutivos que realicen una simulación sobre el efecto en las boletas de los usuarios, particularmente residenciales, y luego definir qué hacer con la suba que, a criterio de las autoridades provinciales, podría aplicarse a partir de mayo, con impacto en la facturación de junio.
El Gobierno busca durante 2024 reducir en forma sustantiva los subsidios energéticos como herramienta base para alcanzar el equilibrio fiscal.
En esa línea, la semana pasada aplicó un nuevo aumento que redundará en una reducción de 0,3 puntos del Producto Bruto Interno (PBI) el costo de subsidiar la energía.
De todas maneras, el Estado mantiene con Cammesa la empresa que maneja el sistema eléctrico, una deuda de unos $ 2 billones que, según trascendió, sería saldada con un bono.
Subsidios: retracción en el primer trimestre
Según Economía y Energía, en el primer trimestre del año la cantidad de subsidios devengados clave en la cadena de suministro de energía fue 71% menos en comparación con el mismo lapso del año pasado. “La retracción de los subsidios dirigidos al sector energético durante el primer trimestre condujo a un aumento de la deuda del Estado Nacional con los generadores de energía eléctrica y los productores de gas natural, entre otros”, plantearon desde la consultora.