El estrés es un sentimiento de tensión física o emocional y puede provenir de cualquier situación o pensamiento que haga sentir a las personas frustradas, enojadas o nerviosas.
El cortisol, por su parte, es conocida como la hormona del estrés. Esta sustancia, que es producida por las glándulas suprarrenales, puede incrementarse por diversos factores y generar los malestares conocidos por la enfermedad.
Existes dos tipos de estrés: agudo y crónico. El agudo es un estrés a corto plazo que desaparece rápidamente. Puede sentirse cuando se pelea con la pareja o con un amigo. También ocurre cuando se realiza una actividad nueva o emocionante. Todas las personas sienten estrés agudo en algún momento.
El crónico dura un periodo prolongado. Se puede tener estrés crónico si se tienen problemas de dinero, un matrimonio infeliz o problemas en el trabajo. Cualquier tipo de estrés que continúa por semanas o meses es estrés crónico. Puede acostumbrarse tanto al estrés crónico que no se da cuenta de que es un problema. Si no encuentra maneras de controlar el estrés, este podría causar problemas de salud.
Los cuatro malos hábitos que aumentan el estrés
El portal especializado en salud mental Psicología y Mente reúne en una publicación los hábitos que incrementan el estrés en el cuerpo.
1. Tomar mucho café
La cafeína tiene compuestos activos aumentan el ritmo cardíaco. Debido a esto, influye en el aumento de los niveles de cortisol. Por esta razón es necesario evitar el consumo de este tipo de bebidas que contengan cafeína o mateína (mate, mate cocido, café, bebidas del tipo cola).
2. No dormir suficiente
No tener un buen descanso puede incrementar la secreción de cortisol. Irse a dormir de modo irregular, sin horarios establecidos, no solo es perjudicial para el estrés, sino que afecta la salud física y mental. Los expertos señalan que se debe dormir al menos ocho horas cada día. Además, es preferible acostarse a dormir entre las diez y doce de la noche.
3. Sedentarismo
Una persona sedentaria tiene más riesgo de incrementar fácilmente el cortisol en el cuerpo, debido a que en el ejercicio el cuerpo se libera de estas secreciones y en cambio estimula la producción de hormonas como la serotonina o dopamina, sustancias relacionadas con un bienestar emocional.
4. Mala alimentación
La comida influye en el ánimo, en especial los alimentos azucarados y carbohidratos refinados pues estos generan desbalances en el azúcar.