La tarta de espinaca sin harina y sin gluten es una opción deliciosa y versátil que no compromete el sabor ni la textura, ofreciendo una alternativa apta para celíacos y para aquellos que buscan reducir el consumo de harina en su dieta.
Esta receta, que combina espinacas frescas, papas y una mezcla de quesos, es una opción sabrosa y nutritiva que se puede disfrutar en cualquier ocasión. Además, al no contener harina ni gluten, es ideal para quienes siguen una dieta libre de gluten o buscan opciones más saludables y livianas.
Ingredientes:
2 papas medianas
1 cebolla
1 atado de espinacas
2 huevos
100 g de mozzarella
50 g de queso roquefort
Sal y pimienta al gusto
Mostaza en grano
Aceite de oliva
Instrucciones:
Comienza cortando una papa en rodajas finas a lo largo y la otra con el mismo grosor a lo ancho. Luego, dora las rodajas en un sartén con aceite hasta que estén doradas por ambos lados, asegurándote de no cocinarlas demasiado.
Una vez que las papas estén frías, colócalas en un molde para tarta formando la base y los costados. Superpón las rodajas entre sí para que puedan soportar el relleno sin problema.
Para preparar el relleno, comienza cortando la cebolla en cubitos y saltéala en aceite hasta que esté transparente. Agrega el atado de espinacas cortadas en tiras y condimenta con sal, pimienta y mostaza en grano. Cocina por 1 o 2 minutos, hasta que las espinacas se reduzcan de tamaño.
En un bowl, mezcla los huevos batidos con la mozzarella en dados. Agrega las verduras salteadas y mezcla bien.
Vierte la mezcla de huevo y espinacas sobre la base de papas en el molde para tarta y distribuye uniformemente. Agrega trozos de queso roquefort por encima.
Precalienta el horno a 200°C y hornea la tarta por aproximadamente 15 minutos, o hasta que el relleno esté cocido y dorado.