Mañana veremos un nuevo aumento en los precios de los combustibles, estimado en alrededor de un 5%. Esta subida se debe a la actualización del impuesto a los combustibles y a los cambios en la cotización del dólar oficial. Se espera que las petroleras reflejen estos porcentajes en el precio en los surtidores, con posibles ajustes adicionales.
En Tucumán, por ejemplo, el precio del litro de nafta súper de YPF aumentará aproximadamente $37,59, lo que llevaría el costo a alrededor de $932,59.
El Impuesto a los Combustibles Líquidos (ICL), que estuvo congelado hasta febrero, comenzó a aplicarse en cuotas trimestrales basadas en la inflación de 2021 y 2022. Se espera que este aumento contribuya con un 0,5% adicional al Producto Interno Bruto (PBI) este año, compensando el intento fracasado de aumentar las retenciones en el Congreso.
El próximo mes se espera una nueva cuota de aumento del ICL, que se prevé que tenga un impacto significativo debido a la aceleración inflacionaria generada por la devaluación. Según estimaciones, este aumento podría representar un alza del 35%.
El objetivo de alcanzar una paridad con los precios internacionales sigue siendo una meta para YPF, que tiene el 60% del mercado local. Sin embargo, el Ministerio de Economía ha solicitado postergar este ajuste para demostrar una desaceleración en la inflación.
YPF prevé que aún falta un aumento del 8% al 10% en los precios de la nafta y el gasoil en los surtidores para lograr esta paridad de importación.