En el momento que se realizó el sorteo del fixture de la Primera Nacional y se designó a Chaco For Ever como rival del interzonal, se generaron diferentes sensaciones en los fanáticos del "santo" y, sobre todo en Diego Flores. Sin dudas es un partido que puede empezar a marcar el rumbo de San Martín de Tucumán.
Tras la derrota de la fecha pasada, el técnico está prácticamente obligado a encontrar una reacción en sus pupilos y así aprovechar la ocasión que se le presenta para volver a ponerse el traje de candidato.
Antes de esto, debemos ponernos en contexto. A pesar de que el emparejamiento con el equipo de la zona B tuvo interrogantes por la poca cercanía entre las provincias, también hubo una especie de conformismo por el antecedente histórico que tienen entre sí ambos conjuntos.
Todavía se mantiene latente el recuerdo de aquella final del dodecagonal 1987/1988 que otorgaba un ascenso a Primera división y que quedó en manos del “santo”, por un global de 3-0.
Por eso, el partido del lunes en La Ciudadela, no será uno más ni mucho menos. Si bien el historial está a favor de los tucumanos, con 12 triunfos en 19 disputados, lo cierto es que actualmente llegan con realidades distintas.
A pesar de que los dirigidos por Flores vienen de caer por la mínima contra Chacarita, el empate de Quilmes en Carlos Casares (1-1 vs. Agropecuario) le dejó servida en bandeja la chance a San Martín de alcanzar la cima de la zona A, siempre y cuando, otros resultados lo acompañen.
Mientras que el conjunto chaqueño también se trae lo suyo. En la fecha anterior se floreó de local y venció al líder de su zona, Defensores de Belgrano, por 3-0. Si bien un triunfo de estas magnitudes significa un importante envión anímico, en Chaco For Ever esta regla no se cumple al 100%.
Los dirigidos por Diego Osella llegan a nuestra provincia en forma de protesta. Los futbolistas y el cuerpo técnico del “albinegro” no cobran su sueldo hace dos meses; como así tampoco los bonos acordados.
Por este motivo, a través de un comunicado en las redes sociales anunciaron que ante la falta de respuestas por parte de la comisión directiva, viajarán y saldrán a la cancha sin la indumentaria oficial del club. Esto con el objetivo de visibilizar su descontento.
“Hemos decidido que en el próximo encuentro el plantel profesional concurra al viaje y al encuentro con vestimenta de civil. Desde nuestra parte siempre demostramos buena voluntad y mantuvimos la ética laboral para tratar de resolver dicho conflicto. Nos encontramos en una situación de total incertidumbre”, dice parte del mensaje que fue replicado por distintos integrantes del equipo.
No obstante, en lo que respecta al lado futbolístico, Chaco For Ever fue de menor a mayor en el torneo. Se ubica décimo cuarto en la tabla de posiciones, con nueve puntos, producto de dos triunfos, tres empates y misma cantidad de derrotas.
En ese sentido, el “albinegro” se muestra veloz en ataque y efectivo en el juego aéreo, pero todavía mantiene algunas falencias en defensa. Tuvo su debut con derrota (2-0 vs. Gimnasia y Tiro de Salta) y desde allí no sumó de a tres unidades hasta la sexta fecha, con una victoria sobre Brown de Adrogué, por 3-0. Justamente ese partido fue la levantada de Chaco For Ever, que tras empatar sin goles contra Almagro, dio el batacazo.
De local, recibió al “dragón” y lo tumbó. Los tantos del triunfo para el “negro” fueron marcados por Gastón Novero, Genaro Rossi y Jonathan Dellarossa, una de las figuras que tiene el equipo de Osella.
El centrodelantero de 23 años, que llegó a Chaco For Ever en este mercado de pases proveniente de Instituto, lleva tres goles y misma cantidad de asistencias en lo que va del torneo. Además, se destaca por su velocidad, gran altura y exquisita definición.
Cómo es característico en los equipos de Osella, el “albinegro” muestra un juego intenso y vertical. Mientras que el esquema favorito del DT y que mantuvo en los últimos partidos se refleja en un asentado 4-4-2, misma táctica que había utilizado en su último paso por Newell ‘s. En este caso, el “doble” nueve de Chaco For Ever está conformado por Dellarossa y Rossi, una de las piezas que llegó de la “lepra” y que el técnico santafesino conoce bien.
En la mitad de cancha, Brian Nievas y Novero son un arma de doble filo, con sus remates de larga distancia. Entre los relevos para ese sector, está el ex “santo” Daniel González como una opción para generar juego.
Pero como cualquier equipo, los de Resistencia también tienen sus debilidades.
En el fondo, el arquero Gastón Canuto brinda muchos rebotes que son aprovechados por el rival y para colmo, el bloque defensivo no termina de consolidarse. Desde la primera fecha se realizaron distintas modificaciones, a pesar de tener futbolistas de peso como Milton Leyendeker, ex zaguero central de Agropecuario recordado por provocarle una dura lesión al delantero de Boca Exequiel Ceballos. Además, los laterales son muy lentos en el retroceso y pierden rápido en la marca.
“Es un rival durísimo. Defensores de Belgrano había recibido un gol en siete fechas y Chaco le hizo tres. Tiene buen frente de ataque y saben a lo que juegan. Tenemos que seguir trabajando para dar vuelta el resultado, en esta categoría al igual que en Primera, es muy difícil, pero si queres ser campeón tenes que lograr eso”, aseguró Flores que ya empieza a palpitar el partido del lunes.
San Martín tendrá el desafío de superar el primero de los dos duelos que se disputarán de manera consecutiva en La Ciudadela y con la ventaja de la localía, deberá sacar provecho a cómo dé lugar. El interzonal puso a Chaco For Ever en el camino y qué mejor que un rival de estas magnitudes para recuperar la sonrisa.