La segunda fecha del Campeonato Iniciación de hockey tendrá un toque especial. Entre tantos colores de camisetas se colarán, imaginariamente, el color celeste y blanco nacional que aportarán tres jugadores de San Martín. Por estas horas viven el tercer día de trabajo en la concentración que Los Leoncitos hacen en el club San Fernando de Buenos Aires. Lucas Ojeda, Juan Pablo Mendoza y Juan Ignacio López son los que respondieron a la convocatoria de Juan Ignacio Gilardi, campeón olímpico en Río de Janeiro 2016 y actual técnico del equipo Junior.
El medallista busca el equipo ideal para el objetivo inmediato: el Panamericano de junio. La misma camada es la que se proyecta a largo plazo para el Mundial que se jugará en 2025. Los tres estarán a disposición el domingo cuando el “santo” enfrente a Natación y Gimnasia en el estadio de la zona del Parque 9 de Julio.
Desde lo físico es probable que, encarar la fecha del torneo local, sea un poquito más duro de lo habitual, pero desde lo mental y anímico el trío seguramente tendrá mucho por derrochar si se tiene en cuenta la sensación que López reveló tener. “Los que estamos aquí, estamos pensando en ganar un lugar en el equipo”, destacó. Y no es cualquier equipo, es una Selección nacional por lo que los entrenamientos tienen un rigor diferente a los del club, no solo por la exigencia que puede imprimir el cuerpo técnico, sino porque la oportunidad de llegar a representar al país la tienen pocos y todos quieren cumplir una meta que es importantísima para cualquier deportista. “En el juego en sí del torneo tucumano, no creo que cambie algo”, afirmó López sobre la presencia de ellos en los partidos del fin de semana tras la convocatoria nacional. “Si creo que quizás cambie el pensamiento y sirva de motivación para otros jugadores”, reflexionó.
El mismo pensamiento tiene Ojeda. Cuando vuelvan a empuñar el palo para maniobrar la bocha en las canchas tucumanas, no serán jugadores distintos porque en cuatro días técnicamente o tácticamente, es poco lo que se puede modificar, si es que hay necesidad de hacerlo. Para el jugador puede que el certamen local gane en nivel cuando hay jugadores que regresan de concentraciones nacionales, pero principalmente la inyección que pueden aplicar es más mental. “Es importante para los más chicos, que por ahí creen que es muy difícil ser convocados. Con mucho trabajo todo se puede cumplir”, aseguró Ojeda.
A diferencia de sus compañeros que ya van por su cuarta concentración, Mendoza vive su primera convocatoria. El debutante percibe el cambio un poco más que López y Ojeda. “En el club estamos trabajando con el objetivo de la Liga Nacional por eso el año tendrá más intensidad, concentración y fuerza. En la concentración nacional se busca llegar al ritmo de juego internacional. Es mucho más exigente con los planteos y la potencia”, describió.
Lo que cuenta Mendoza lleva a pensar que no es casualidad que su deporte de cabecera sea el hockey, pese a la anécdota que identifica como el origen de que sea un jugador de hockey. “Para no estar aburrido, me ponía a jugar”, recuerda. Si habla de intensidad y exigencia es porque ya de pequeño, exactamente a los 10 años, sentía que le gustaba convivir con esas sensaciones. “Siempre jugué en San Martín. Mi mamá me llevaba a sus entrenamientos. Un día el entrenador me invitó a entrenarme y desde entonces, nunca dejé de jugar”, completó la historia.
La mira de Los Leoncitos está dirigida hacia el Panamericano. La misión de Argentina es lograr la clasificación al Mundial del próximo año. Además mantener la supremacía que ejerce el país en la región, ya que de las 13 ediciones disputadas, en 12 el título lo ganó Argentina.
Mendoza es el que pone las metas en orden. “El Panamericano en Canadá es el primer objetivo, lo más cercano. Después están los objetivos de juego que nos marca el entrenador en los ejercicios y en el planteo de juego”, contó el volante.
Los tres “santos” le pondrán un toque nacional a la segunda fecha del Campeonato local. Una buena oportunidad para ver a los potenciales Leoncitos.