El Gobierno descartó incluir la vacuna contra el dengue en el sistema nacional que la haría gratuita y obligatoria al cuestionar su efectividad, cuando el país alcanza un récord de 79 fallecidos en ocho meses por este virus. En Tucumán los contagios ya superaron los 10.000.
“La inmunidad se logra a través del paso del tiempo, por lo que vacunar ahora implicaría que esa inmunidad la vas a lograr en cuatro meses, donde ya el mosquito no sea un inconveniente, más allá de que la efectividad no está comprobada”, dijo en el inicio de la semana el vocero presidencial, Manuel Adorni, en conferencia de prensa.
Aseguró que la decisión de incluirla en el calendario "no está en agenda", aunque la decisión puede cambiar en el futuro.
Entre julio del año pasado y marzo "se registraron en el Sistema Nacional de Vigilancia de la Salud 79 casos de dengue fallecidos, de los cuales 69 pertenecen al año 2024", informó el fin de semana el Ministerio de Salud. Se detalló que 22 de ellos corresponden a la última semana.
En lo que va de 2024 se reportaron más de 102.000 casos en el país, lo que equivale al 86% de los 120.000 casos registrados, otro récord.
El presidente Javier Milei opinó el domingo, en una entrevista, que la crisis con el dengue es “parte de la desidia del kirchnerismo”, refiriéndose al gobierno anterior al que acusó, además, de “no haber hecho una buena campaña hace un año”.
Contra este virus transmitido por el mosquito Aedes Aegypti existe en Argentina la vacuna TAK-003, también conocida como Qdengam, del laboratorio japonés Takeda. Cada dosis cuesta unos 70.000 pesos, mientras el salario mínimo está fijado en 202.800 pesos.
Los científicos, en desacuerdo con el Gobierno
Eduardo López, médico infectólogo del Hospital de Niños de Buenos Aires, contradijo a Adorni. "Los estudios muestran que las vacunas son seguras y eficaces", manifestó al canal C5N.
En sintonía, Andrea Gamarnik, viróloga, especialista en el virus del dengue e investigadora del Conicet denunció en la red social X que Argentina está “en la peor epidemia de dengue de la historia” pero que no los “dejan trabajar” porque, considera, el gobierno está desmantelando al sistema científico.