Imputan a un menor por la amenaza de bomba al colegio San Carlos

Por primera vez en la provincia, imputaron a un menor por ser coautor de una amenaza de bomba. El adolescente de 16 años fue acusado junto a su tío de realizar la falsa alarma al colegio San Carlos. Ambos quedaron en libertad, cumpliendo medidas de menor intensidad.

Según la acusación realizada por la auxiliar fiscal Jessie Luz García, el hecho ocurrió el 18 de agosto de 2023, aproximadamente a las 7.50. El joven, junto a su tío G.J.D (38) enviaron el mail intimidatorio al correo electrónico del colegio San Carlos, ubicado en Virgen de la Merced al 400. “Atención, urgente. Queremos informarles sobre nuestra colocación de artefactos y materiales explosivos colocados sobre la institución. Lo recomendable es evacuar las instalaciones lo más antes posible. Atención, esto no es un simulacro, quedan avisados”, decía el mensaje.

La representante de la Fiscalía de Cibercriminalidad que dirige Carlos Saltor explicó que llegaron hasta los acusados gracias a un informe del mail enviado por Google del cual obtuvieron un número de teléfono. “Hicimos la investigación respecto de ese número con la empresa prestataria del servicio y realizamos un allanamiento en el domicilio sindicado de quién podría ser el titular de la línea. Allí estaban tanto el dueño de la línea junto con el menor, quien hizo entrega voluntaria de su teléfono celular”, señaló García.

Luego de que imputaron al menor y a G.J.D de ser coautores del delito de intimidación pública, el adolescente admitió haber realizado la amedrentación. “Dijo que desconocía las consecuencias y que se trataba de un delito”, dijeron desde la Fiscalía.

Debido a que solamente resta realizar la extracción de datos del dispositivo secuestrado, la Fiscalía solicitó que ambos imputados sean sometidos a medidas de menor intensidad por el plazo de dos meses, las cuales fueron aceptadas por la jueza Judith Solórzano. “El adolescente fue devuelto a sus padres, debe seguir yendo a clases y cumpliento conductas de un menor”, indicó la auxiliar fiscal.

Desde que comenzaron las imputaciones por las falsas amenazas ocurridas el año pasado, esta es la primera vez que un menor queda formalmente involucrado y acusado del delito de intimidación pública.

A pesar de que el adolescente haya confesado su autoría, la Fiscalía continuará con la investigación, para comprobar o no la participación del adulto, y para respaldar su acusación ya que el menor “podría estar mintiendo o encubriendo a otra persona”.

Además informaron que no descartan la posibilidad de cerrar la causa a través de un juicio de cesura o por medio de una salida alternativa. “Entiendo que es la primera causa en la que estamos imputando a un menor de edad; esto no es menor respecto a los demás estudiantes ya que sería un mensaje de que estos hechos se investigan y que por más que sea una broma, una salida ante un examen que no estudiaron, tiene sus consecuencias. Es importante llevarle el mensaje a la sociedad de que es un delito y como tal se tienen que hacer responsables tanto la persona que lo hizo como quien dio los medios para hacerlo”, le manifestó García. (Producción periodística Micaela Pinna Otero).