Los gobiernos norteños miran al sur y se posicionan frente a Milei

La disputa protagonizada entre el presidente Javier Milei y el gobernador de Chubut, Ignacio “Nacho” Torres, por la quita de recursos coparticipables a la provincia patagónica, a raíz de una deuda, marcó, sin dudas, un punto de inflexión en la relación entre el Gobierno nacional y las administraciones provinciales. En este escenario, el fallo del Juzgado Federal de Rawson N° 1 fue celebrado por algunos mandatarios que lo recibieron como un triunfo del federalismo y momentáneamente, la resolución del juez Hugo Sastre llevó tranquilidad a un conflicto que había crecido de manera alarmante.

Con este antecedente, los gobernadores patagónicos rápidamente se encolumnaron detrás de Torres y post fallo judicial bajaron el tono al conflicto e invitaron al Presidente a un encuentro regional que se realizará el 7 de marzo próximo en la ciudad de Puerto Madryn. Mientras este vínculo intenta reconstruirse, en el otro extremo del país los gobernadores comparten preocupaciones y reclamos pero mantienen un perfil menos confrontativo.

En las asambleas legislativas que encabezaron en las últimas horas, distintos mandatarios del norte de país hicieron fuerte hincapié en las asimetrías existentes con la región central del país y sostuvieron que el impacto de las últimas medidas económicas de Nación es sumamente nocivo para la administración de sus jurisdicciones. También se mostraron abiertos a mejorar los vínculos con Nación.

El último viernes, el gobernador Osvaldo Jaldo ratificó su apertura al diálogo con la gestión libertaria. De hecho, fue uno de los primeros mandatarios peronistas en manifestarse a favor de la convocatoria realizada por Milei para rubricar un nuevo pacto fundacional.

Sin claudicar

El gobernador de Jujuy, Carlos Sadir, dejó inaugurado el 163º periodo de sesiones ordinarias de la Legislatura local y, en su primer mensaje al frente del Ejecutivo, convocó a la ciudadanía a “seguir trabajando por el progreso” de la provincia y sostuvo que, pese al “escenario adverso que se agudiza con el nuevo rumbo de las políticas socioeconómicas nacionales”, la provincia norteña tiene “herramientas” y “estabilidad financiera” para salir adelante.

“No vamos a dejar de pedirle a la Nación por los recursos que nos corresponden y que nos pertenecen a los jujeños, llámese impuestos a la ganancia, fondos de incentivo docente, subsidios de transporte, que hacen a la previsibilidad y la posibilidad de proyectar sabiendo con qué recursos contamos”, dijo Sadir en relación al contexto nacional. Y añadió: “Vamos a transitar este proceso nacional con la fuerza, la inteligencia y las acciones necesarias. Nuestra historia nos recuerda las luchas como el Éxodo jujeño y el rol en las batallas por nuestra independencia. Entendemos que hay mucho que modificar, pero desde el consenso, el diálogo y el respeto”.

En esa misma línea, el dirigente radical remarcó que el entendimiento y la tolerancia deben ser la “mejor plataforma política para dar respuesta a las necesidades de la gente”.

Predisposición

El gobernador de Salta, Gustavo Sáenz, consideró el último viernes que los problemas fiscales de la Nación se deben resolver “con medidas cuyos costos se soporten equitativamente”, y remarcó que la provincia vecina es la segunda jurisdicción “más afectada por los recortes de transferencias nacionales”, por lo que adelantó que acudirá a todos los ámbitos institucionales, incluido el Poder Judicial, en defensa de los intereses de los salteños, y volvió a pedir “un gran acuerdo nacional”.

En la primera parte de su extensa exposición en el Palacio Legislativo, el mandatario salteño detalló que a partir de la pérdida de partidas nacionales los recursos de achicaron un 12% “lo que impacta sensiblemente en los gastos que deben afrontar la provincia y los municipios”. “Las partidas que se redujeron suman $30.000 millones menos en enero”, explicó.

El dirigente peronista opinó también que “Argentina necesita entrar en una etapa de reconciliación y encuentro”, al tiempo que resaltó la necesidad de apostar por un federalismo más activo. “En este tiempo difícil he remarcado la voluntad de acompañamiento al gobierno elegido por el pueblo y a favor de que se le otorguen las herramientas para avanzar en su plan de gobierno”, dijo. Y resaltó: “Expresé permanentemente mi negativa a apoyar medidas que perjudiquen los intereses federales y sobre todo a los salteños, pero eso no invalida apoyar lo que entendemos que sirve”.

Finalmente, insistió en la defensa del Fondo Nacional de Incentivo Docente solicitándole enfáticamente a la administración nacional que “se cumplan los contratos para la ejecución de las obras públicas y de otras partidas comprometidas por la anterior gestión” y volvió a pedir “la reversión del gasoducto Néstor Kirchner” para que el norte no se quede sin gas en junio.

Plantó bandera

En la apertura de un nuevo período ordinario en la provincia de Formosa, el gobernador de Formosa, Gildo Insfrán, fue el más vehemente a la hora de dar su discurso y cargó contra “quienes prometieron solucionar los problemas del país hoy solamente los están empeorando”.

Además de pedir “respeto a la voluntad soberana” de su provincia, Insfrán les pidió tranquilidad a sus comprovincianos. “A este Gobernador no lo disciplina nadie. Tengo un solo mandante: el pueblo formoseño. Sé lo que tengo que hacer: como argentino, defender a la Patria; y como Gobernador, defender los intereses de Formosa”, enfatizó.

El presidente del Congreso Nacional del Partido Justicialista (PJ) cargó también contra el modelo económico impulsado por la gestión libertaria e indicó que “en campaña decían que el ajuste lo iba a pagar la casta, pero luego asumieron el Gobierno y se aliaron con la casta para ajustar brutalmente sobre el pueblo”. “El plan económico no es novedoso. Repite el modelo neoliberal”, cerró.