Una noche de alegrías y decepciones se vivió ayer en el programa de Gran Hermano. Volvió “Congelados” y esta vez fue el tueno del tucumana "Manzana" Farías y Rosina Beltrán, quienes recibieron la visita de su novia y de su mamá respectivamente. Pero no todo fue emoción, también hubo una dura sanción para la participante uruguaya.
La dinámica que inauguró Santiago del Moro la semana pasada, revolvió los sentimientos de los participantes en la casa. En el "Congelados", los jugadores deben controlar todos sus movimientos mientras que uno de sus familiares los visitan.
Gran Hermano: “Manzana”, inmóvil ante los besos de su novia
Cuando “Manzana” vio entrar a su novia, sus ojos se agrandaron y una sonrisa se esbozó en su cara. A su llegada, lo primero que hizo su novia fue darle un beso y le advirtió que “se quede quieto”. Luego esta recorrió toda la casa e incluso se resbaló en el mismo piso en que los demás jugadores ya tienen por habitual caerse: “ya entiendo por qué todos se resbalan ahí”, dijo la joven.
Por último, los minutos que quedaron, Luciana se dedicó a llenar de besos a su novio y decirle al oído lo que sentía. “Quedate quieto. Estoy bien. Te amo mucho.” “Es una experiencia única. Yo estoy bien. Te extraño todos los días”, le aseguró su novia mientras este permanecía inmóvil. Antes de irse le dio un consejo. “Disfrutá el momento”, le indicó Luciana que luego cerró con un beso de despedida.
Gran Hermano: sanción para Rosina tras la visita de su mamá
Los afortunados que recibieron la visita de sus seres queridos hasta ahora fueron Emmanuel, quien se reencontró con su esposo, “Licha” que pudo ver a su novia y Nicolás quien protagonizó un momento enternecedor junto a su madre.
En el programa de ayer les tocó a otros dos jugadores, Rosina y Manzana. Sin embargo, este momento no fue tan gratificante como los anteriores. En medio de la visita de su madre, Rosina rompió el reglamento del juego y deslumbrada por la emoción le dirigió unas palabras a esta, preguntándole por la salud de su gata. Esto provocó la furia del “Supremo” que tomó duras represalias contra la jugadora: esta no podrá competir por el liderazgo ni participar en el juego para ganarse una casa.