El centro de la escena política viene buscando definiciones a partir de tres actores clave: Javier Milei, Patricia Bullrich y Mauricio Macri. De un lado -libertarios y afines al Presidente de la Nación- y del otro -miembros del PRO y ex funcionarios- especulan acerca de la mejor estrategia para la conformación del Estado nacional que liderará durante los próximos años. ¿Alianza, fusión o un nuevo frente?
De Buenos Aires nacen versiones que se replican en todo el país. Desde la llegada del fundador de La Libertad Avanza (LLA) al Sillón Rivadavia, una parte de Juntos por el Cambio (JxC) -en especial, la que corresponde a Propuesta Republicana (PRO)- fue acercándose a los sitios de mando nacionales.
El partido creado por Mauricio Macri es dirigido desde 2020 por Patricia Bullrich, aunque perdió fortaleza y apoyo internos tras asumir como ministra de Seguridad en la actualidad. Así es como el ex presidente aparece de nuevo en la escena; además de ir juntando acompañamiento para retomar el poder del bloque, ya se habla de un potencial acuerdo con el mandatario nacional, Javier Milei.
Quien gobernó la Nación durante el período 2015-2019 ya avisó que está dispuesto a volver a ocupar la conducción partidaria. En distintas ocasiones, expresó que el PRO perdió singularidad política e ideológica y que, en paralelo, Milei apareció para llenar esos vacíos que dejó su partido. Del otro lado, el Presidente puede salir beneficiado por el interés de Macri, a partir de las urgencias políticas que atraviesa por el traspié de su “Ley Ómnibus” y su falta de armado territorial para gobernar el país. El PRO significa una alianza de la que puede sacar gran provecho.
En tanto, en la configuración interna del bando “amarillo” consideran que es indispensable que dicho entendimiento se lleve sin descuidar la base del partido mismo. “En el PRO se debe dar un debate que redefina a sus nuevas autoridades con una lógica que diga cuál es su posición frente al Gobierno”, analizó Pablo Walter, ex senador nacional e interventor del partido local.
“Una cosa buena es que hay en Mauricio y Patricia una necesidad de reforzar los acuerdos con LLA y no de seguir dentro de las incoherencias en las que cayó JxC donde algunos están en un sentido, otros en contrario, hay opositores, aliados y demás”, observó.
Para que esto ocurra y se logre una alianza efectiva, todo tiene que empezar en el Congreso de la Nación, según Walter. “Hay posibilidades de que se dé una reconfiguración de los espacios políticos y de que el PRO, junto con LLA, dirigentes del radicalismo y sectores sueltos, sean parte de una fuerza política que represente las ideas del cambio y de la libertad. Pero se debe empezar desde lo mínimo, que es el Parlamento”, indicó.
Además, sumó otro factor. “Hay otro tema y es que hay que pensar en este espacio común para liderar las elecciones legislativas de medio término y reforzar la gestión del Ejecutivo nacional aprovechando la experiencia y los cuadros que tiene el PRO en muchas áreas”, dijo.
El PRO y LLA deberían mantener su identidad pero pertenecer a un mismo frente electoral. Así es como lo define Walter: “Todo está recién en conversación, pero hay una coincidencia para avanzar en acuerdos mientras el PRO define una nueva conducción mucho más homogénea y alineada con esta mirada. Cada uno debe mantener su identidad partidaria”.
Algo similar expresó Nadima Pecci, ex legisladora de Tucumán. “El PRO debe encarar una alianza para compartir los mismos objetivos finales, pero aportando la diferente visión que tenemos sobre algunos temas”, opinó.
Consideró que la alianza de los bloques libertarios y de cambiemos es “una consecuencia natural” de lo que decide la gente. “Debemos aliarnos si de verdad luchamos por un cambio profundo, por eliminar los privilegios y la corrupción y porque la sociedad nos demanda que estemos unidos. En las PASO, la gente eligió el rumbo que debía tomar el PRO; ganó la opción de un cambio rotundo que lideraba Patricia con el apoyo de Mauricio. Para que funcione y para que el cambio sea verdadero, profundo y sostenible debe darse en todos los planos”, desarrolló Pecci.
También se mostró a favor de la alianza con el Gobierno nacional Alberto Colombres Garmendia, dirigente local. “A LLA le falta un poco de músculo político, que eso podría complementárselo con el PRO que puede darle más gobernabilidad y más gestión de la que tiene hoy”, planteó.
Hizo una observación al pasado gobierno de Mauricio Macri y lo comparó con el actual. “En su momento a Macri también le costó mucho esa inexperiencia, el no conocer las distintas áreas de un gobierno. Esa experiencia el PRO ya la tiene y sería innecesario que LLA cometa los mismo errores”, manifestó Colombres Garmendia.
Pese a las opiniones a favor y en contra que se despliegan en ambos partidos, el ex legislador reflexionó que “a veces, los egoísmos y el no querer ceder lugares, pesan”. “Hay que mantener -como hizo en su momento JxC- la individualidad pero compartiendo la gestión. Sería un gobierno compartido: la presidencia de LLA y que el PRO acompañe con sus cuadros, experiencia y personas”, propuso.
“En claro”
Por el lado de Fuerza Republicana (FR), que responde a las ideas libertarias, el armado de este acuerdo debe formarse con más cautela y prestando atención a los detalles. “Hay que ser muy cuidadoso”, resumió Ricardo Bussi.
“Primero, debe conformarse una mesa política para analizar entre las partes cuál sería el rol de cada uno. Luego, dejar en claro que el que gobierna y marca el norte a seguir es el presidente Javier Milei”, puntualizó el legislador tucumano.
Así, la incorporación del PRO en las arcas del Gobierno debe responder a una “vocación transformadora” donde se aporten soluciones integrales “al cambio que votaron los argentinos”. “Espero que, si se da, el PRO esté a la altura de las circunstancias”, agregó.
Bussi comparó la situación con una experiencia reciente a nivel local durante las elecciones provinciales. “Más de una vez intenté armar un gran frente opositor siendo traicionado cuando (Roberto) Sánchez y (Mariano) Campero me soltaron la mano y no pusieron lo que hay que poner”, remarcó.
Siguió: “FR, en las últimas elecciones presidenciales, le dio espacios en la fiscalización de mesas tanto al PRO como a un espacio de la Unión Cívica Radical (UCR). Esto fue producto del consenso y el diálogo con los otros sectores de la política; nosotros entendemos que la oposición debe ser constructiva, nosotros somos distintos”.
A su declaración le siguió la de Gerardo Huesen, a quien Bussi cedió su banca en la Cámara de Diputados para asumir en la Legislatura de Tucumán. “La alianza, por el momento, es legislativa y tiene un objetivo: fortalecer el trabajo en el Congreso de la Nación. Si resulta exitosa, sería bueno que se expanda en todas las áreas de gobierno y a lo largo y ancho del País. La vocación del cambio debe ser mayor a la del status quo”, sostuvo.
En esta línea, se refirió a la reciente oferta de Karina Milei hacia Cristian Ritondo (PRO) de liderar un interbloque entre los diputados de LLA y el macrismo, que finalmente fue rechazada. “Ese interbloque podría -y puede- funcionar siempre y cuando se dejen de lado las mezquindades”, determinó Huesen.
Continuó: “Mi postura será acompañar la decisión del Presidente y hacer todo lo necesario para aprobar leyes que mejoren la vida de los argentinos. Confío en él y en la sabia decisión que pueda tomar en la conformación de alianzas”.
En el Congreso
En tanto, en Buenos Aires tampoco se descarta una alianza legislativa con el PRO, aunque se espera la postura oficial de Milei. El presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem, aseguró que los partidos políticos pueden “trabajar de manera conjunta” en el Congreso, aunque dejó en claro que la decisión final será del libertario y que la idea es “sumar de a uno, más allá de un nombre o un interbloque”.
“Sí, creo que se puede trabajar de manera conjunta. Hemos defendido mismas ideas”, manifestó Menem en declaraciones radiales. Incluso, el diputado libertario detalló que hay “correspondencia ideológica” con “un sector importante del PRO”. Para Menem, en Diputados hubo “confluencia de ideas hasta ahora” a nivel legislativo y, en el caso de la Cámara baja, destacó el apoyo del PRO a la Ley Ómnibus. Además dijo que la forma en la que decantará un eventual acuerdo o unión de fuerzas políticas se verá “con el correr del tiempo”.
Al ser consultado sobre una confluencia entre bloques, el titular de Diputados expresó: “Puede pasar. Es una alternativa trabajar de esa manera. Igual, cuando vas a los resultados de cualquier sanción ley, siempre sumás de a uno, más allá del nombre de bloque o interbloque. Hay que juntar 129 para el quórum; la mitad más uno para las leyes y la mayoría absoluta para leyes especiales”. Y cerró: “Definirá el presidente”.