Las redes sociales y el internet acortaron las distancias en todo sentido. Ritmos que hace unos años podían ser exóticos, hoy están a un click de cada persona y el fútbol no es esquivo a ello. Cada vez que juega la Selección (sea la categoría que sea) se inundan las redes sociales con posteos y videos que muestran un poco de la intimidad de los jugadores. Así, luego de la victoria a Brasil y sacar pasaje para los Juegos Olímpicos de París 2024, se viralizaron una serie de videos en los que se ve a los integrantes de la Sub-23 festejando el logro. Sin embargo, dejaron de lado las típicas canciones de cancha, para exportar un ritmo propio de las celebraciones europeas.
“Freed from Desire” de la cantante italiana Gala Rizzatto fue el tema elegido por los dirigidos por Javier Mascherano para tararearla, bailarla y festejar lo logrado en Venezuela. Incluso, apareció Claudio “Chiqui” Tapia en medio de los festejos junto a los juveniles. Pero…¿Por qué se volvió viral este tema?
CHIQUI TAPIA ENTRE LOS FESTEJOS DEL SUB 23, CLASIFICADO A LOS JJ.OO.
— 351 Deportes (@351Deportes) February 11, 2024
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El éxito de esta canción se remonta a la Eurocopa 2016. En aquel año, los hinchas noirlandeses le dedicaron a Will Grigg, el por entonces goleador del Wigan Athletic, equipo que había logrado el ascenso al Championship (segunda división británica).
Debido al gran presente del delantero, un hincha del Wigan compuso el tema “Will Grigg’s on fire, your defense is terrified” y las redes sociales hicieron su trabajo de popularizarla.
A esto se sumó el condimento de que en aquel certamen continental, Irlanda del Norte completó una actuación histórica, llegando hasta los octavos de final. Lo curioso fue que el delantero del Wigan no disputó ni un solo minuto en aquella competición.
Asimismo, el tema fue viral teniendo sus distintas adaptaciones dependiendo del delantero de turno. Incluso, años atrás, se difundió un video de los hinchas del Ajax dedicando la canción al serbio Dusan Tadic.
De cabeza a París 2024: Argentina derrotó a Brasil y clasificó a los Juegos Olímpicos
En el mundo del fútbol hay partidos que se deben ganar obligadamente, sin importar las formas. El encuentro que jugaron hoy Argentina y Brasil por el Preolímpico Sub-23 es un ejemplo de ello. Disputándose un lugar en los Juegos Olímpicos, frente al rival de toda la vida: ¿Qué importa el cómo?.
En ese sentido, Argentina cumplió. Gracias a un centro medido del pie zurdo de Valentín Barco a la frente de Luciano Gondou, la “albiceleste” estampó su firma en el resultado y dejó al enemigo, seco, desahuciado, sin nada.