04 Febrero 2024
El fuego no da tregua. Imagen tomada de www.laangosturadigital.com.ar
El incendio desatado en el Parque Nacional Los Alerces no da tregua y el viento y las altas temperaturas, conspiran contra el éxito del operativo desplegado desde hace más de una semana atrás. El fuego ya devoró más de tres mil hectáreas en Chubut.
"La lucha contra el fuego podría complicarse luego del mediodía porque se espera mucho calor y un viento más fuerte", advirtió Mario Cárdenas, jefe del departamento de Incendios Comunicaciones y Emergencias (ICE) del Parque Nacional.
En declaraciones a Télam, Cárdenas dijo que "todavía no empezaron las condiciones complicadas que se esperan para luego del mediodía", cuando se pronostica "muchísimo calor y viento, así que ahí vamos a ver cómo nos trata (el fuego)".
Por el momento, los brigadistas se encuentran "avanzando todo lo que se puede, todo el equipo y los medios aéreos, por si se complica más tarde con el viento", agregó.
Según informaron fuentes provinciales, son más de 260 los brigadistas que se encuentran desplegados en ocho sectores del Parque. Intentan combatir los incendios forestales desatado hace varios días atrás y que hasta el momento arrasaron con 3.147 hectáreas de vegetación.
A diferencia del panorama desalentador de este domingo, ayer la jornada fue considerada como "un día productivo" por los especialistas. Hubo escaso viento y esto facilitó la acción de las líneas cortafuego, según indicó anoche el Comando Unificado del Parque Nacional Los Alerces y el Servicio Provincial de Manejo del Fuego de la Secretaría de Bosques de Chubut.
"El fuego continúa activo en la mayoría de los frentes - informaron los voceros -, comportándose con especial intensidad cuando llega a los cañadones, generando condiciones extremas".
Y agregaron: "El dispositivo de apoyo aéreo operó normalmente durante la mañana, con helicópteros y aviones hidrantes descargando agua en los puntos calientes más críticos, en tanto que la flota de drones de observación monitoreó el perímetro para calcular el avance de los frentes de fuego".
"El incendio tiene un comportamiento extremo. El fuego quema en retroceso, contra el viento, y cuando baja al cañadón hace una especie de efecto chimenea: sube con fuerza y quema lo que protegiste el día anterior", contó Hernán Mondino, oriundo de Trevelin y uno de los tantos brigadistas que trabajan a destajo.
En una nota brindada a Diario Río Negro, el brigadista consignó que el punto más álgido del incendio se encuentra en "los cañadones" dado que allí las condiciones del viento son "variables", con ráfagas de 75 kilómetros por hora. "Son condiciones extremas, con turbulencias y remolinos. Esto lleva a que se generen columnas convectivas que incrementan la intensidad del fuego", describió.
Para este domingo por la tarde se pronostica un ascenso de la temperatura y del viento, por lo que espera que esas condiciones meteorológicas modifiquen la estrategia del combate, en función de la seguridad de los brigadistas que trabajan en los sectores más expuestos al avance de las llamas.
En tanto, las autoridades indicaron que los servicios turísticos habilitados funcionan normalmente, aunque se recomienda conducir con extrema precaución en el tramo de la ruta provincial 71 que atraviesa el Parque Nacional debido a la alta circulación de los vehículos afectados a la logística del operativo, que tienen prioridad de paso en todo momento.
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