Volver a jugar y recuperar la alegría, el objetivo de Gianluca Ferrari en Atlético Tucumán

Volver a jugar y recuperar la alegría, el objetivo de Gianluca Ferrari en Atlético Tucumán

El defensor central, que llegó desde Godoy Cruz, no juega desde hace casi un año por lesión, y no oculta sus ganas de volver a las canchas.

Volver a jugar y recuperar la alegría, el objetivo de Gianluca Ferrari en Atlético Tucumán LA GACETA / Foto de Inés Quinteros Orio

En el último año, Gianluca Ferrari necesitó de mucha paciencia. También la necesitó en las últimas semanas para definir su llegada a Atlético luego de no poder comenzar la pretemporada en Tucumán, algo que pretendía hacer, pero que fue impedido por una pequeña demora en las negociaciones. Y la necesitó mucho más, durante todo 2023, año en el que casi no jugó por una dura lesión. Ahora, la flamante incorporación “decana” apunta a un gran regreso.

“Hace varias semanas que vengo hablando con la dupla. Siempre me interesó la propuesta y me gustó el club. Se fue dando todo para que llegue”, relató, en diálogo con LA GACETA, luego de su primer entrenamiento. En realidad, de su primer trabajo junto a sus nuevos compañeros: por la lluvia, lo primero que hizo con la vestimenta del “decano” fue trabajar en el gimnasio.

El zaguero central de 26 años ya conoce a Favio Orsi y a Sergio Gómez de su paso por Godoy Cruz. Eso fue clave para su arribo a la institución de 25 de Mayo y Chile.

Cuando la dupla estuvo en el “tomba”, Ferrari fue titular en 32 de los 36 partidos que dirigieron, logrando mantener la valla invicta en 12 ocasiones. Por eso, la posibilidad de volver a encontrarse con ellos lo motivó a cambiar de aire. “Estaba muy cómodo en Godoy Cruz, pero siempre es bueno también un cambio de aire. A la dupla le tengo mucha confianza; con ellos anduve muy bien, sé cómo se manejan, y sé que van a venir buenos resultados”, indicó.

Claro, no sólo llega a Atlético por Orsi y Gómez. El central aseguró estar ilusionado por lo que es Atlético como institución. “Si bien en este último torneo tuvo muchos altibajos, Atlético viene de jugar Libertadores, de tener un buen momento, y es un club muy lindo. He jugado en contra y siempre está la cancha llena, la gente alienta los 90 minutos. Eso también motiva a un jugador a venir. Estoy muy contento”, expresó.

Para el rosarino, 2023 fue complicado. En la tercera fecha disputada el 11 de febrero, sufrió la ruptura del ligamento cruzado anterior de su rodilla derecha. La lesión lo marginó varios meses de las canchas, y de hecho, no volvió a sumar minutos en Primera pese a que ya estaba a disposición del cuerpo técnico del “tomba” en el tramo final del año. Por eso, apunta todos los cañones a tener un 2024 en el que pueda reencontrarse dentro del campo.

“Fue duro porque un jugador lo que quiere hacer es jugar. Cuando te sacan eso, es como que te sacan todo. Pero son cosas del fútbol; me recuperé bien, me siento bien, que es lo importante, y estoy mentalizado en jugar”, sostuvo. “Hace 4 meses que vengo entrenándome al 100%. No quiero ir de a poco; ya quiero arrancar con todo. Si es necesario, mañana ya estoy para jugar”, agregó.

Una de las particularidades de la carrera de Ferrari es que su debut en Primera se dio en el ascenso italiano. Tras pasar por las inferiores de Tiro Federal y de Unión de Santa Fe, entre 2014 y 2017 pasó por Scandicci, Latina y Montecatini, su último club antes de volver a Argentina para jugar en San Lorenzo. “En Italia hay un fútbol muy táctico, muy defensivo. Entonces, de chico, aprendí mucho todo eso y sobre el famoso catenaccio”, comentó al respecto.

De Italia al Bajo Flores; de allí a Mendoza, y ahora a Tucumán, una provincia de la que no conoce mucho, pero de la que tiene buenas referencias. “Conocía muy poquito. Todos me dijeron que es muy linda, muy tranquilo, y me comentaron que hace mucho calor”, dijo el central, que también recibió indicaciones culinarias. “Me comentaron que tengo que probar las empanadas y los sándwiches de milanesa. Vamos a ver si el nutricionista me deja”, añadió, entre risas.

Lo cierto es que para él, esta oportunidad en Atlético será la revancha de un amargo 2023, y un nuevo desafío. Los objetivos, claro, son ambiciosos. “Esperemos volver a aquellos tiempos de luchar por el ingreso a la Libertadores, y de pelear el torneo. Hay que apuntar alto, creo que apuntando a entrar a las copas, después se van a abrir otros panoramas”, opinó sobre el objetivo que tienen todos en 25 de Mayo y Chile.

En cuanto a lo individual, la meta es clara para él: “quiero volver a ser el que era antes de la lesión. Quiero tener continuidad, sumar muchos puntos y que no nos metan goles”.

Objetivos que, en caso de cumplir, le servirán tanto a él como a Atlético, que se reconstruye con la ilusión de volver a ser el equipo que fue.

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