10 Enero 2024
(Suquia)
Ante el brote epidémico de encefalomielitis equina, enfermedad que ha tenido contacto con humanos y ya se han registrado 12 casos de personas contagiadas y el primer caso en el Noroeste argentino en Santiago del Estero, se vuelve imprescindible el estar informados. Aquí las claves para comprender la enfermedad.
¿Qué es la encefalomielitis equina?
La encefalomielitis equina del Oeste (EEO) es una enfermedad infecciosa que ha pasado de un animal a humanos (zoonosis) y causada por el virus del mismo nombre que pertenece al género Alphavirus.
¿Cómo se transmite la enfermedad?
El virus de la EEO se transmite principalmente a través de la picadura de mosquitos infectados, específicamente el Aedes albifasciatus y posiblemente la especie del Aedes scapularis, sin embargo, se están realizando ensayos para confirmar si este también actúa como vector, es decir, como transmisor.
Ambas especies se encuentran en abundancia en los campos, estas transmiten la infección principalmente a aves y equinos pero también a humanos.
Los brotes se establecieron en las provincias de Buenos Aires, Catamarca, Chaco, Corrientes, Córdoba, Santa Fe, Entre Ríos, Formosa, Río Negro, La Pampa, San Luis y Salta. Mientras que en el Noroeste se registró un caso localizado en Santiago del Estero.
Riesgo de Infección
El riesgo de infección por la EEO está determinado en general por la exposición a los transmisores infectados, y esto se da sobre todo en las personas que viven, trabajan o que participan en actividades al aire libre sobre todo en el campo, en las áreas endémicas o donde se presentan focos activos del virus.
Síntomas del virus
La enfermedad se identifica por periodo caracterizado con fiebre, escalofríos, malestar general, debilidad y mialgias, seguido por un periodo de estado con síntomas leves inespecíficos, que en ocasiones progresan a cuadros neurológicos que pueden incluir letargo, somnolencia, rigidez de nuca, fotofobia y vértigo y en casos graves, estupor y coma.
(El País)
¿Cuándo se considera “caso sospechoso”?
Se considera caso sospechoso toda persona asistida en un servicio de salud que “presente o haya presentado fiebre de comienzo brusco, acompañada de cefalea o mialgias sin afectación de las vías aéreas superiores; y presente manifestaciones neurológicas -vómitos, somnolencia, confusión, postración, temblores- meningitis o encefalitis y sin otra etiología definida; y viva o haya viajado a una localidad donde esté ocurriendo un brote de EEO hasta 10 días previos al inicio de los síntomas.”
¿Se trata de una enfermedad nueva?
La enfermedad no es nueva, se trata de una reemergencia de una infección viral que había generado brotes en animales y humanos en el pasado. En la Argentina, desde 1933 hasta 1988 hubo diferentes brotes que afectaron a los equinos principalmente. Solo se reportaron dos casos humanos en 1972 y otros cinco casos en 1983 en la provincia de Río Negro.
Cómo prevenir la enfermedad
El ministerio de Salud recomienda principalmente evitar la picadura de mosquitos, para ello si nos encontramos al aire libre, utilizar ropa de manga larga y usar repelentes y reaplicarlos periódicamente. También en el exterior de los hogares utilizar espirales y pastillas o aerosoles en el interior.
Otras recomendaciones son limpiar los espacios donde se encuentran los caballos, desmalezar los lugares donde se puedan alojar los mosquitos y drenar o rellenar los espacios con agua que puedan servir de criadero de mosquitos.
Tratamiento y vacunas
No existe un tratamiento específico de la enfermedad, así como tampoco vacunas para humanos. Sin embargo, existen vacunas para los equinos que son accesibles. La vacuna volvió a ser obligatoria cuando el Senasa declaró la emergencia sanitaria a raíz de los brotes de noviembre.
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