La intendenta Rossana Chahla comenzó a encargarse de la gestión municipal a finales de octubre. Camino a fin de año, quedaron próximos a habilitarse algunos de los puntos centrales del área de obras públicas: 16 locales del Mercado del Norte abrirían en marzo y un sector de la Asistencia Pública volvería a funcionar en abril.
El edificio comercial de Maipú y Mendoza es una promesa que existe desde la gestión anterior, a cargo de Germán Alfaro, cuando se inició con el proceso de revalorización de una de las piezas más emblemáticas de San Miguel de Tucumán.
Luis Lobo Chaklián, secretario de Obras Públicas del municipio, aseguró que el Mercado del Norte está concesionado y se está trabajando en la primera etapa. De esta manera, los 16 locales comerciales del exterior del edificio, más la restauración del frente con pintura y colocación del reloj, quedarían habilitados para fines de marzo de 2024.
El resto, que comprende a una segunda etapa, demorará hasta 2025. “Hay que habilitar unos 90 locales en el interior, lo que llevaría entre 12 y 15 meses más. Es una obra importante, el Mercado del Norte tiene 11.000 metros cuadrados y dentro de ellos se prevén dos escaleras mecánicas, una zona gastronómica, más la climatización y otras cosas”, fundamentó el funcionario.
Mientras avanzan las obras en el futuro paseo comercial de la ciudad, Lobo Chaklián subrayó que la prioridad en materia edilicia es recuperar el sitio de la Asistencia Pública, que cerró en 2018. La tarea es que la planta baja y el primer piso queden habilitados para fines de abril del año entrante.
Según Lobo Chaklián, el trabajo que se ha venido realizando en el edificio fue el de estabilizar la estructura. “Hicimos una limpieza general de todo el edificio, demolimos la estructura y destacamos una gran cantidad de superficie de entrepisos. También estaba previsto originalmente demoler aquellas mamposterías que generaban sobrecarga”, detalló.
Una vez que se complete el refuerzo del armazón, se cambiarán las cañerías de agua, de gas y de cloaca. Entre otras cosas, el arquitecto mencionó la modificación de los pisos de planta baja y el mejoramiento de la iluminación en todo el edificio.
Otras prioridades
Además de las dos principales obras pendientes en San Miguel de Tucumán, Lobo Chaklián adelantó que durante 2024 se pondrá el foco en las tareas de alumbrado, semáforos, bacheos y cordones cunetas. “La doctora Chahla estableció dos pautas de trabajo y la primera es que en seis meses hay que equilibrar la gestión en cuanto a mantenimiento y repavimentación de la obra pública”, indicó.
En tanto, el arquitecto mencionó que la segunda etapa -que empezaría en mayo- consiste en desarrollar un programa de urbanización en los barrios que carecen de cordón cuneta o pavimento, para otorgar infraestructura y accesibilidad a los sectores tradicionales.
Dentro de los programas de recuperación y mantenimiento de la obra pública, Lobo Chaklián mencionó el trabajo en veredas, en rampas para discapacitados y en la planta de asfalto que el municipio tiene en Las Talitas, que se espera que funcione nuevamente a fines de marzo. “Eso nos daría un potencial bastante importante porque se abaratan costos y no dependeremos de la terciarización de la provisión de asfalto”, destacó.
En cuanto al bacheo, se especula con que a fines de febrero quede realizado el trabajo en toda el área central y en las calles principales de acceso; que serían unas 3.500 imperfecciones de suelo, según el arquitecto. “De las 7.000 cuadras que hay en la ciudad, 5.160 tienen problemas de pozos, quiebres, desbordes o grietas y 1.200 no tienen pavimento”, informó el funcionario.
Alumbrado, semáforos y plazas
Por otro lado, y mientras se trabaja en las tareas en el suelo, Lobo Chaklián adelantó que ya se está trabajando en las licitaciones para el proceso que sigue; el de alumbrado público. “En la Capital tenemos 50.000 luminarias y hay que empezar a hacer un reemplazo de ellas. El LED, como cualquier otro artefacto, tiene una vida útil. En cambio, con el tema de los semáforos no es sólo el reemplazo de lámparas sino la reconversión del sistema”, explicó.
Además del sistema de iluminación, la promesa también es que dentro de los próximos seis meses se normalice el sistema semaforizado. “Hay que incorporar una tecnología nueva que se sostenga en el tiempo. Al día de hoy, tenemos 387 complejos semaforizados; si pudiésemos ir ampliando un 10% anual, a lo largo de la gestión se puede llegar cómodamente a las 500 unidades”, confió el profesional.
Otro punto que destacó Lobo Chaklian es que se trabajará en la recuperación integral de las plazas principales -en conjunto con la Secretaría de Servicios Públicos- en lo que respecta a piso, iluminación y riego de los espacios.
“Hay un plan muy ambicioso para darle calidad a la ciudad y contamos con un equipo de gente que combina la juventud con la experiencia y la preparación para llevar a cabo una gestión en la cual no se improvisa. Se hace lo que se debe hacer”, cerró.