El gobernador, Osvaldo Jaldo, afirmó esta mañana que la provincia se encontraba en alerta amarilla debido a pronósticos de tormentas, vientos fuertes y posibles caídas de granizo.
"Afortunadamente, hasta el momento, no se han reportado daños materiales ni personas afectadas por los eventos climáticos", dijo ante la prensa.
El mandatario informó que "hoy se iba a llevar a cabo una reunión con diversos sectores para labores preventivas y de respuesta ante las lluvias". "Esto incluye a comisionados comunales, intendentes y responsables de escuelas, con el fin de establecer protocolos y coordinar acciones ante posibles inundaciones o necesidades de evacuación en la provincia", expresó.
"Además, se planifica una reunión con el personal del Ministerio de Salud y del Siprosa, quienes intervienen en situaciones climáticas extremas para garantizar una respuesta eficiente ante emergencias por inundaciones u otros eventos meteorológicos", recalcó.
Por su parte, el director Defensa Civil, Fernando Torres, se refirió a las lluvias que cayeron en la madrugada, tanto en la capital, Burruyacu, como en el Sur .
"La lluvia cayó en distintos puntos de la provincia y ha tenido una intensidad dispersa. La alerta amarilla emitida por el pronóstico meteorológico se manifestó durante la madrugada, con avisos a corto plazo en áreas del Sur, donde se registraron alrededor de 37 milímetros de lluvia. A pesar de esto, no se han reportado inconvenientes significativos según los referentes locales", indicó.
Torres añadió que "el fenómeno climático se desplazó hacia el Noreste de la provincia, impactando en el departamento de Burruyacu con alrededor de 50 milímetros de lluvia. Aunque se ha estado en contacto con los referentes de diferentes municipios, no se han recibido informes sobre impactos graves en la población o daños relevantes, más allá de posibles molestias en zonas urbanas debido a acumulación de agua, como en la capital".
Por otro lado, el director Defensa Civil explicó: "el Ministerio de Interior ha estado activo, coordinando con comunas y la Dirección Provincial de Vialidad (DPA) para el mantenimiento y limpieza de caminos terciarios. Estas acciones son fundamentales para mejorar la evacuación de aguas pluviales, limpiar cunetas, y optimizar canales, especialmente en regiones como el sureste de la provincia, donde el escurrimiento de aguas de lluvia es crucial y donde se han concentrado recursos para facilitar el drenaje rápido en caso de lluvias intensas o crecida de ríos".