Se trata de una combinación muy frecuente en la preparación de postres, aunque también la podés aprovechar lejos de este contexto en forma de bebida. La clave radica en tomarla cada noche, minutos antes de irse a dormir. A continuación te contamos cuáles son sus beneficios.
Propiedades de la miel y la leche
La leche y la miel son dos alimentos muy populares en la dieta debido a sus aportes nutricionales. Tal y como señalan los expertos, la leche contiene hasta 22 nutrientes esenciales, entre los cuales destacan péptidos bioactivos y ácidos grasos como caseínas, ácidos linoleicos conjugados, proteínas de suero, lípidos polares de la leche, ácido α-linolénico, palmítico ácido y lactosa.
Por su parte, se sabe que la miel está compuesta por al menos 181 sustancias, entre las cuales destacan la fructosa y la glucosa como azúcares principales. También cuenta con maltosa, sacarosa, maltulosa, turanosa, isomaltosa, laminaribiosa, nigerosa, kojibiosa, gentiobiosa y B-trehalosa.
Así, tanto la leche como la miel cuentan con propiedades nutricionales muy beneficiosas para la salud. Si combinamos ambas podemos agrupar en un solo lugar todas estas, sin mencionar que conforman una alimento delicioso al paladar.
Cinco razones para tomar leche con miel
1. Puede reducir tu cansancio y fatiga muscular
Se ha sugerido que beber leche y miel luego de hacer una actividad física extenuante puede retrasar la aparición del dolor muscular. El efecto oscila entre leve y moderado, pero puede ser útil luego de una jornada extenuante. Particularmente, se perfila como una opción interesante para quienes hacen ejercicio o desarrollan una labor física demandante en su trabajo.
2. Mejora tu digestión
La miel tiene propiedades prebióticas. Esto significa que estimula el crecimiento y el desarrollo de las bacterias beneficiosas que son de gran ayuda para tu intestino y tu sistema digestivo.
Por otro lado, los hidratos de carbono y oligosacáridos que contiene la miel también promueven el funcionamiento saludable y adecuado de las bacterias beneficiosas para tu tracto digestivo. Así lo afirma un estudio realizado por la Universidad de Auckland (Nueva Zelanda). Todo esto se traduce en beneficios para problemas como:
- Estreñimiento;
- Calambres intestinales;
- Hinchazón;
- Desajuste del microbioma y microbiota.
3. Mejora tu energía
Se cree que tomar leche con miel todas las mañanas mejora en gran medida la resistencia y la energía de tu cuerpo. Estudios e investigaciones sugieren que tanto la leche como la miel son grandes alimentos para potenciar la energía en personas sanas.
Esto se debería a que la leche contiene proteínas y la miel carbohidratos que son necesarios y requeridos para estimular tu metabolismo. Gracias a las enzimas, eso sí, la proteína animal de la leche se descompone en aminoácidos básicos, que luego son transformados para crear proteínas útiles para los humanos.
4. Cuida de la salud de tus huesos
La leche es una fuente rica de calcio. Por eso, tomar leche con miel te aportará los nutrientes que tu cuerpo necesita para la salud de tus huesos, tal y como afirma un estudio realizado por la Universidad de Teherán (Irán).
Además, ayudará a optimizar la absorción para ayudarte a prevenir de manera más eficiente enfermedades como osteoporosis y la inflamación de las articulaciones .
5. Combate el insomnio
Tomar leche con miel tibia antes de dormir es una de las formas más conocidas de conciliar el sueño cuando el insomnio ataca. Se ha usado para mejorar la calidad del sueño en pacientes con enfermedades que dificultan el descanso nocturno. Podés beber una taza de leche con miel para potenciar tu somnolencia.
Lo que debes tener en cuenta al momento de tomar leche con miel
A pesar de que la ingesta de leche con miel puede proveerte diversos beneficios en tu salud, su exceso o su uso inadecuado puede tener un efecto contrario. Por ejemplo, el consumo de lácteos se ha relacionado con una mayor probabilidad de desarrollar acné vulgar. También se lo relacionó con la rosácea, sin mencionar los episodios de intolerancia a la lactosa.
Por otro lado, se sabe que calentar la miel puede generar un compuesto denominado 5-hidroximetilfurfural (HMF). A este se le atribuyen efectos mutagénicos, genotóxicos, organotóxicos e inhibidores de enzimas. La miel nos debe usarse en niños menores de un año debido al riesgo de botulismo.
Además, tené en cuenta que la ingesta regular de leche y miel puede elevar la carga calórica de tu dieta. Así, si la bebes en exceso y la combinas con una vida sedentaria, puede hacerte subir de peso.
Si llevas una dieta equilibrada y tenés buenos hábitos, como ejercitarte regularmente y evitar el tabaco, los beneficios de la combinación tendrán mayores efectos. Lejos de centrarse sólo en estos, considerá la ingesta de esta combinación para disfrutar de su agradable sabor.