FRANJA DE GAZA.- El Ministerio de Salud de la Franja de Gaza informó que sus provisiones de vacunas infantiles se agotaron y advirtió que habrá gravísimas consecuencias para los niños, tras más de dos meses de ofensiva militar israelí contra el movimiento islamista palestino Hamas.
La advertencia llega luego de que organismos y organizaciones internacionales humanitarias y de defensa de los derechos humanos alertaran de las terribles condiciones de vida en este territorio palestino. Dos afirmaciones ilustran algo de la dimensión de la catástrofe humanitaria: “La Franja de Gaza es ahora mismo el lugar más peligroso del planeta para los niños”, según el director regional de Unicef; y “Gaza ya no es un lugar habitable”, de acuerdo con la denuncia de la Unrwa.
Ambas agencias de Naciones Unidas -Unicef es la agencia para la infancia y la Unrwa es la que se ocupa de los refugiados palestinos- vienen advirtiendo acerca de las consecuencias de la destrucción casi total en Gaza: hambre, enfermedades, falta de agua potable y desplazamiento forzado hacia lugares peligrosos.
Tras 69 días de guerra, más de un millón de palestinos han huido al sur, a Rafah, en la frontera con Egipto. El responsable de la Unrwa, Philippe Lazzarini, que acaba de visitar la Franja, dijo que Rafah, que ha cuatriplicado su población, no tiene las infraestructuras necesarias y que la gente está “desesperada, hambrienta y aterrorizada”.
Los más afortunados se refugian en escuelas y almacenes de la ONU, totalmente masificados y sin condiciones sanitarias. Pero miles de personas están en la calle, bajo tiendas improvisadas, viviendo en el frío, en el barro y bajo la lluvia. Lazzarini señaló que, por muy difíciles que fueran las condiciones en la Franja, los gazatíes nunca habían pasado hambre. “La gente para los camiones, agarra la comida y se la come allí mismo. Lo vi con mis propios ojos”, explicó, aclarando que no son desvíos de ayuda, sino actos de pura desesperación.
El Ministerio de Salud de Gaza hizo un llamado a instituciones internacionales a fin de que suministren urgentemente vacunas, aunque no dijo cuáles son las necesarias.
El director de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Ghebreyesus, también alertó que el sistema de salud de Gaza está “de rodillas y colapsando”. Solo 14 de los 36 hospitales de Gaza siguen funcionando, con insumos médicos apenas para atender urgencias, y se espera que empeoren las condiciones a medida que la situación se deteriore con la llegada del invierno, dijo Tedros.
La ofensiva aérea y terrestre israelí en Gaza provocó la muerte de más de 18.400 palestinos, en su mayoría civiles e incluidos más de 7 mil niños y niñas. También resultaron heridas al menos 50.000 personas en poco más de dos meses.