La posibilidad de ver el mejor hockey del mundo a una distancia muy corta de casa es algo para aprovechar. Así lo entendieron cientos de tucumanos que se desplazaron, y se están desplazando, estos días a Santiago del Estero, para disfrutar de la Pro League de hockey, que cuenta con la presencia no sólo de Leonas y Leones (seleccionados argentinos), sino también de Países Bajos, líder del ranking mundial en ambas ramas, y Gran Bretaña.
El mundo del hockey tucumano, de distintas formas, se organizó para decir presente al menos uno de los seis días que dura el evento en la provincia vecina. En algunos casos, la organización llegó directamente desde el club, como sucedió en Lawn Tennis, donde una delegación de 100 personas, compuesta mayormente por jugadores de las categorías infantiles y juveniles, pudo presenciar los encuentros entre Argentina y Países Bajos.
“Las chicas de infantiles tienen desde siete años en adelante, y de las categorías juveniles fueron chicas de Sub-14 y Sub-16”, detalló a LA GACETA Rocío Renta Mora, coordinadora de las categorías infantiles del club de Parque 9 de Julio.
Renta Mora contó que el año pasado también se organizó un viaje similar, aunque hasta Mendoza, donde también hubo una fecha de Pro League. “En esa ocasión, llenamos tres ómnibus de 60 personas, con infantiles, juveniles y plantel superior. Este año solo viajaron juveniles e infantiles, con entrenadores y algunos padres que se sumaron”, repasa Rocío.
Desde que se tomó la decisión de realizar esta travesía, de unas pocas horas pero muy emocionante, las jóvenes jugadoras del club demostraron su entusiasmo. “Estaban fascinadas, lo están esperando desde que nos enteramos que la Pro League era en Santiago del Estero. Incluso hicieron unas banderas del club”, subrayó Renta Mora, que agregó que las chicas también aprovechan para aprender de las mejores. “Están pendientes de todo, de las jugadas, de los gestos técnicos”, aseguró.
“Nos encanta hacer este tipo de viajes, donde para nosotros lo principal es fomentar la unión del grupo, la unión de todas como club. Eso nos parece lo más enriquecedor de ésta experiencia, más allá de lo que puedan aprender del hockey en sí”, reflexionó la coordinadora de infantiles, que hizo un balance más que positivo del viaje.
“Todo salió perfecto. Fue una experiencia muy buena, para algunas de las más chicas era la primera vez que veían a las Leonas en vivo y estaban muy felices. Al final estaban todas enloquecidas por conseguir una firma, por suerte Eugenia Trinchinetti y Delfina Thomé se coparon y vinieron a firmar, y los Leones y los jugadores de Holanda también, así que volvieron muy felices todas”, detalló.
Algunas de las propias jugadoras de Lawn Tennis le contaron a LA GACETA la emoción de haber podido ver a sus ídolas en cancha. “Lo que quería de este viaje era poder divertirme con mis amigas del club, y también poder ver cómo juegan las Leonas, alentándolas, y al mismo tiempo aprendiendo de sus jugadas, de sus pases”, contó Catalina, jugadora de la Sub-16.
La joven agregó, además, que la jugadora que más admira del seleccionado nacional es Agustina Albertario. “Veo que entrena y se esfuerza mucho todos los días, y que por eso se merece estar en donde está”, dijo al respecto.
Por su parte, Lucía, integrante de la categoría Sub-14, se enfocó principalmente en la experiencia compartida con amigas, más allá de lo que pueda aprender del deporte en sí. “Pude disfrutar de este viaje con mis amigas y familia, que es como un regalo de cumpleaños para mi. Fue hermoso divertirme y pasarla bien, y tener la oportunidad de ver a mis ídolas jugar”, señaló. En su caso, contó que admira a María José Granatto, por “su humildad, su juego y su gran habilidad para pasar a cualquier rival que se le ponga en frente”.
Así como Catalina, Lucía y decenas de chicas más de Lawn Tennis, fueron cientos los tucumanos que vivieron experiencias similares en Santiago del Estero, y que todavía la vivirán en los días que restan de Pro League. Porque conjugar la pasión por el hockey, viendo a los mejores del mundo y a su selección, y además compartirlo con amigos y familia, es una experiencia inolvidable para cualquiera.