Los primeros municipios que encararon con seriedad el problema de la disposición de los RSU fueron San Isidro de Lules, Famaillá y Bella Vista, hace varios años atrás; basados en su cercanía física, identidad cultural y recursos físicos, se promovió la constitución de consorcio, con asesoramiento letrado y contable; el proyecto fue el tratamiento y disposición final de los RSU de las tres localidades, con posibilidades de incorporar al emprendimiento a Comunas cercanas; el lugar elegido fue una propiedad ubicada sobre autopista Tucumán-Famaillá, equidistante de los tres centros involucrados; el modelo tomado en cuenta fue el de la ciudad de Cascavel, en Brasil, visitado oportunamente por una delegación de los tres Municipios asociados; el texto del convenio de consorcio fue utilizado para la constitución del actual Girsu, que terminó integrando a las tres municipalidades pioneras. El futuro es replicar el modelo de consorcio en Municipios y Comunas del interior, teniendo en cuenta la regionalidad, sus necesidades locales y particularidades culturales, básicamente educación ambiental. Por otra parte, el consorcio como entidad autónoma puede también promover y administrar otros rubros: promoción del turismo, infraestructura de uso común como mercados, estadios, colegios, comunicaciones, sistematización de ríos que los cruzan, parque vial, promoción, explotación de canteras, y radicación de fuentes de trabajo… municipios y comunas reúnen un importante acervo técnico, profesional, empresario, de docentes y ciudadanos, que adecuadamente organizados en consorcio, potenciarán las posibilidades de progreso de sus respectivos enclaves geográficos.
José Félix Risso
Belgrano 108 San Isidro de Lules