Por Mariana Apud
01 Diciembre 2023
ENORME SONRISA. Pese a no haber conseguido el campeonato, Pablo Ortega asegura que el 2023 fue uno de sus mejores años.
Le faltó sólo un puntito para que 2023 fuera perfecto. Pablo Ortega había empezado la temporada de la Clase 2 del Turismo Nacional con el objetivo de ser campeón del Turismo Nacional en la Clase 2. Sin embargo, esas ganas no iban muy en sintonía con el Chevrolet Onix que conducía, ni con el equipo que lo asistía. A veces un “volantazo” es bueno, y eso fue lo que le encaminó el año a “Pabloso”.
Con el VW Gol Trend y nueva escudería llegó a la fecha 12, la última del equilibrado y federal campeonato de una de las divisionales más ásperas del automovilismo nacional, con chances de ser campeón; aunque dependiendo de otros, y con la incomodidad de tener la calculadora en mano.
Ganador en las fechas de Misiones y Paraná, Ortega quedó tercero en el campeonato y está decidido a seguir buscando el título el próximo año. Como viene pasando en los últimos tiempos, no sólo tendrá como rivales a los colegas en pista, sino a los billetes que debe conseguir para afrontar los elevados costos que implica competir en un contexto de crisis.
- ¿Qué puntaje le ponés a tu temporada?
- Le pongo un nueve porque lo único que me faltó para que sea el 10 fue el campeonato.
- ¿Sos de hacer análisis profundos?
- Pienso que no, pero toda mi familia y mis amigos me dicen que soy muy perfeccionista y muy molesto, por no decir otra palabra.
- ¿Podés establecer qué hiciste bien y qué mal en 2023?
- Lo sé perfectamente; fueron muchas cosas. Hice bien en iniciar la temporada en la primera fecha. No tenía ningún auto disponible y me subí al Onix. Hoy, con “el diario del lunes”, fue una mala decisión pero no había otra. Ahí está el punto bueno y el punto malo. Después, durante el resto de la temporada, creo que lo malo estuvo en ser un poco frío en algunas decisiones a la hora de clasificar, o en alguna serie de no apretar más el acelerador; de no ir más al “chapa-chapa” algunas veces, y otras veces que decidí ir y me salió bien. Entonces, creo que este año fueron más las cosas buenas que malas.
- ¿Fue el año que esperabas?
- Fue mejor de lo que esperaba porque me gusta tener memoria. Cuando empecé el año, con el auto que arranqué, me había puesto una meta de sumar buenos puntos, de ser competitivo, de estar entre los 15, de ir mejorando durante el año y con ese mismo auto recién pensar en un 2024 más competitivo. Empezamos muy mal y a la tercera carrera ya conseguí uno de los mejores autos de la categoría. Ahí yo ya me puse como objetivo llegar a la última fecha con posibilidades de salir campeón y lo logramos. Las expectativas fueron en ascenso.
- La categoría es de la más entretenidas y más difíciles. ¿Te gustaría probar en otra menos exigente a tiempo completo?
- Sí considero que es de las más entretenidas, no sé si de las más difíciles porque para poner una calificación de dificultad inciden muchas cosas. Hoy no pretendo correr en otra divisional a tiempo completo porque no tengo el tiempo para hacer dos categorías, y porque la realidad es que, año a año (y a veces de mes a mes), tenemos más dificultades para estar debido a la situación económica. Creo que el año que viene va a ser muy complicado. Tengo confirmado con el equipo que sigo corriendo, pero a la espera de la situación económica que analizaré en enero.
A PURA VELOCIDAD. Ortega disfruta al máximo de su nuevo VW Gol Trend.
- ¿En qué categoría te gustaría correr si te dieran a elegir?
- Me encantaría correr en el TC, en la máxima categoría. Pero sé que es el TN donde puedo estar, a donde llego. Si el día de mañana puedo crecer, lo haría siempre y cuando sepa que puedo hacer el campeonato durante todo el año y bien hecho.
- ¿Cuál fue la carrera que más recordás de este año y por qué?
- Sinceramente me acuerdo de la mayoría. De la primera que me fue muy mal en Córdoba; de la de Paraná, que fue la primera con el Gol y que fue una buena carrera… Me acuerdo de Posadas, en la que no esperábamos en absoluto ni estar entre los 10, pensábamos andar muy mal y terminé ganando. Lo mismo que en La Pampa que volvimos a ganar. Pensábamos que íbamos a andar bien, pero no tan bien. Y me acuerdo de la última porque era “la” importante para definir el campeonato. También me acuerdo la de Concepción del Uruguay, cuando venía cuarto y quedaba segundo en el campeonato. Aquella vez se me rompió el cárter, tuve que abandonar y no sumé nada de puntos.
EN CARRERA. Ortega se sobrepuso a las adversidades y logró un gran campeonato en la Clase 2 del Turismo Nacional.
- ¿Sentís que das ventaja siendo un piloto de una provincia que no tiene autódromo?
- La desventaja no está impuesta en ese aspecto, sino en lo económico. Por más que vivas a la vuelta del autónomo de San Nicolás, por poner un ejemplo, el costo para hacer una prueba es altísimo. Si pudiera hacer el gasto, haría la prueba. Este año no hicimos ninguna por eso justamente, por el alto costo, y también por los tiempos laborales que tengo. Otros años si tenía más tiempo disponible.
- Ya fuiste subcampeón y este año pudiste hacer tu parte para serlo. ¿Qué crees que falta para llegar?
- Fui subcampeón, este año quedé tercero, terminé quinto otro campeonato, cuarto en otro… me falta el número uno solamente. Sería hermoso poder hacer el año que viene completo y pelear por eso. No tuve suerte en esas carreras como la de Concepción del Uruguay y en las dos primeras fechas, que si podría haber sumado algún punto con el otro auto. Eso me habría ayudado un montón.
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