01 Diciembre 2023
Germán Cano.
Fluminense hará su debut en el Mundial de Clubes el 18 de diciembre. Un cupo que el “flu” logró tras vencer a Boca en la final de la Libertadores por 2-1. No obstante, una disputa interna que se desató en la Conferencia Brasileña de Fútbol (CBF) podría poner en riesgo su participación.
Debido al flojo presente de la Selección de Brasil (tres derrotas consecutivas en las Eliminatorias), la oposición decidió cargar contra Ednaldo Rodrigues, presidente de la CBF. Según O Globo, la idea principal sería arrebatarle su cargo.
Rodrigues es mandamás del fútbol brasileño en marzo del 2022, con 137 de los 141 votos que se contabilizaron. Su periodo se extendería hasta dos meses antes del Mundial 2026. Pero ante el flojo presente de Brasil, la oposición, encabezada por Marco Polo Del Nero y Ricardo Texeira, vio la débil estabilidad del presidente y buscaron irregularidades en la Federación que lo obliguen a dejar su cargo.
Incluso, lograron que el Tribunal de Río de Janeiro programará para la próxima semana el juicio de una acción que busca la nulidad de la elección de Rodrigues y coloca en el cargo a un interventor. Además, se comenzó a elaborar un informe que se buscan irregularidades en el gasto de la actual administración, como facturas impagas y retrasos en algunos pagos, entre otras denuncias.
¿Qué dijo la FIFA sobre esta situación?
Inmediatamente, la FIFA decidió intervenir enviando un comunicado a la CBF en el que se recuerdan algunos artículos de su estatuto. Uno de ellos asegura que la entidad deberá resolver sus problemas sin intromisión de terceros bajo la posibilidad de ser suspendidos.
Es más, la propia FIFA fue la que expulsó a Del Nero por su participación en un escándalo de corrupción vinculado a contratos de comercialización de competiciones como la Copa América y las Libertadores.
En caso de que la oposición logrará su cometido, la máxima entidad del fútbol mundial actuaría de manera inmediata con sanciones severas. Una de ellas sería anular la participación de Fluminense en el Mundial de Clubes, ya que cuando se suspende una confederación, todos los clubes asociados a ella quedan impedidos de participar en competiciones vinculadas a la FIFA. Incluso, a todos los equipos brasileños se les prohibiría jugar la Libertadores y Sudamericana del próximo año.
En este sentido, si Fluminense no estaría en el Mundial de Clubes, ese lugar correspondería a Boca por ser el subcampeón de la última Libertadores.
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