¡Brillante! Con una actuación sobresaliente en todas su filas, la Selección argentina Sub-17 repitió la proeza de la Mayor y venció a Brasil por 3 a 0 en los cuartos de final del Mundial de Indonesia. Sin lugar a discusión, Claudio Echeverri fue el comandante de la victoria albiceleste, marcando los tres goles que inclinaron la balanza a favor de los dirigidos por Diego Placente. Sin embargo, el hambre de gloria de los jóvenes sigue intacto y, más allá de la alegría que implica ganarle al clásico, ya tienen la mente puesta en su próximo rival: Alemania.
Desde el minuto inicial, la Selección asumió la responsabilidad de ser el protagonista y dominador del juego. Gran circulación de la pelota, presión constante y Echeverri siendo el conductor de los hilos ofensivos fueron las claves para desarticular a Brasil que no mostró la lucidez de otros partidos. Es más, la situación más peligrosa fue un mano a mano que Estevao no pudo concretar gracias a la gran salida del arquero Jeremías Florentin.
Sin embargo, Argentina siempre fue más y “Diablito” fue el encargado de refrendar está situación. 28 minutos pasaron para que Echeverri agarre la pelota en la mitad de la cancha, pase a un rival y disparé frente al arco para que la pelota, ayudada por un desvío de Vitor Reis, termine contra la red defendida por Phillipe Gabriel Pires de Oliveira.
El segundo llegó a los 57’. Echeverri volvió a demostrar su magia, gambetenado a dos defensores y definir con gran sutileza ante el achique del arquero. El último también estuvo impregnado de su calidad: tras un gran pase de Agustín Ruberto, dejó en el camino a Pires de Oliveira y sentenció la goleada que le daría el pase a las semifinales. Gracias a estas conquistas, se convirtió en el goleador de la Copa del Mundo con cinco goles.
Vale recordar que la Selección llegaba a esta instancia con un récord negativo frente a la “canarinha”. En los dos enfrentamientos previos por la Copa del Mundo de esta categoría habían terminado en victorias para los brasileños: En Ecuador 1995, la “verdeamerela” venció a la albicelste por 3-0 y, en Egipto 1997, repitieron la hazaña pero por 2-0. Incluso, en el último enfrentamiento entre ambos seleccionados, Brasil se había impuesto por 3-2 en el Sudamericano Sub-17. Por todo esto, el triunfo de los dirigidos por Placente entró en los libros de historia de las selecciones juveniles.
La Selección argentina nunca fue campeón en esa categoría. Desde su primera edición en 1985, su mejor actuación fue finalizar en la tercera colocación: Italia 1991, Ecuador 1995 y Finlandia 2003.
Ahora, enfrentará a “die mannschaft” en las semifinales del certamen. El partido será el 28 de noviembre, a las 5.30. Mañana, Francia enfrentará a Uzbekistán para meterse entre los cuatro mejores; en tanto, Marruecos y Mali definirán el último clasificado.