Daniel Noboa, el candidato más joven de la historia de Ecuador en ganar unas elecciones presidenciales, asumió este jueves como nuevo presidente.
Durante su discurso ante la Asamblea Nacional (AN), el mandatario reivindicó el rol de la juventud y subrayó que no se pueden repetir "las políticas del pasado esperando un resultado distinto".
También advirtió sobre los "tiempos muy difíciles" por la situación económica y de seguridad que vive el país, y llamó a dejar de lado los "viejos paradigmas políticos" para hacer frente a ese cuadro.
"Pocos candidatos estaban dispuestos a tomar el riesgo de esta elección. Por el bien de Ecuador, y porque tengo una visión renovada y joven, me lancé a la Presidencia sin dudarlo. Soy un hombre libre y pragmático que busca con empatía mejorar la vida de los ecuatorianos", indicó.
Y volvió a reivindicar “la fuerza de la juventud”, llamó a construir “un Estado que tenga como primer objetivo reducir la violencia y hacer del progreso una costumbre" y dejó en claro que la tarea contra la inseguridad debe darse con la creación de empleo.
Por último, Noboa los invitó a todos a "trabajar en conjunto para acabar con el enemigo en común: la violencia y la miseria".
"Para combatir la violencia hay que atacar la desocupación; el país necesita empleo y para ello enviaremos reformas urgentes al legislativo", finalizó.