El balotaje para definir al nuevo presidente de la Nación se inició en el sur tucumano sin ningún inconveniente y aunque hubo despliegue de móviles para el traslado de votantes, estos lo hicieron sin ningún tipo de identificación. La Regional Sur de la policía, a media mañana, recibió denuncias sobre el acarreo de personas a las escuelas y la irrupción de gente que destruía votos en inmediaciones de una escuela de Concepción.
Según el jefe de la URS, comisario Marcos Barros, el desplazamiento de autos partidarios trasladando electores no podían ser intervenidos en razón de que eran escasos y no había forma de ser individualizados. Precisó, por otro lado, que los uniformados a su cargo determinaron que la rotura de votos estaba siendo practicada por un par de jóvenes con trastornos mentales.
El secretario de Gobierno y Justica, Raúl Albarracín, tras votar cerca de las 12 en la escuela Uladislao Frías de “La Perla del Sur”, habló para valorar la conducta cívica que exhibían los electores que en un porcentaje del 50% ya había asistido a sufragar hasta el mediodía. En la ocasión el funcionario descartó cualquier posibilidad de fraude en estos comicios.
“La Cámara Nacional Electoral se maneja con mucha rigurosidad y transparencia y por ahí las denuncias que podrían haber surgido es propia del folclore electoral o chicanas políticas”, advirtió. Albarracín insistió que la existencia de solo dos candidatos “está contribuyendo a que la gente se desplace con mayor tranquilidad y celeridad, en una jornada en la que el calor nos dio un poco de tregua”.
“Esto revela -observó- que esta elección será una fiesta cívica sin anomalías. Es la mejor forma de honrar a estos 40 años de democracia”, remarcó. Albarracín descartó que estos comicios acusen una caída en el nivel de concurrencia de votantes a raíz del fin de semana largo que lleva a emigrar a mucha gente en busca de descanso.
“Puede ser que algunas personas se ausenten, pero los argentinos tenemos una madurez en el compromiso cívico y va a concurrir a votar”, apuntó.
Reclamo por el mal estado de la escuela Uladislao Frías de Concepción
En la misma escuela en que votó Albarracín, ubicada a una cuadra de la plaza principal, tronó la bronca de algunas personas a causa del pésimo estado de sanitarios del establecimiento. “Los baños son un desastre y hoy se siente el mal olor hasta en las aulas en que se vota. Es lamentable esta situación que se da en este local al que concurren más de 2.000 niños”, dijo Alcira Abregú, una abuela de dos alumnos que concurren a esa escuela.
“La Uladislao Frías era modelo no hace mucho años por las condiciones de su edificio y la enseñanza. Ahora es una vergüenza. Hay varios sectores con obras que quedaron a medio hacer. El municipio y la provincia la abandonaron. Esto representa un alto riesgo para la salud de los chicos que concurren a clase”, sostuvo Abregú. El reclamo fue tomado por el secretario de Gobierno que se comprometió a gestionar una solución urgente al problema.