10 Noviembre 2023
SÍNTOMAS. El Streptococcus pyogenes afecta las amígdalas y la piel, y se presenta con fiebre alta, mucho dolor de garganta y dificultad para tragar.
“En realidad Streptococo pyogenes es una bacteria, también clasificada como del grupoo A, frecuente. Tiene su lugar en la garganta o eb la piel y afecta tanto a niños como adultos. Suele generar lo que se conoce como faringoamigdalitis”, explicó la doctora Patricia Villagra, coordinadora de Guardia de Emergencias Pediátricas, del Siprosa, durante una entrevista que mantuvo ayer con LG Play.
“Se manifiesta con fiebre mayor de 38°, dolor de garganta y dificultad para tragar, incluso duele cuando el paciente traga saliva”, agregó la especialista Señaló que cuando el médico hace la observación del paciente en la guardia, se observa en las amígdalas un puntillado blanco. “Esa es la diferencia con el cuadro viral, que es cuando la enfermedada es provocada por un virus. En este último caso las amígdalas se ven enrojecidas”, aclaró.
Explicó que como en todo proceso respiratorio, el estreptococo se contagia a través del contacto de persona a persona. “También tiene mucho que ver con lo que nosotros, los profesionales de la salud, venimos insistiendo desde la pandemia de covid-19: la higiene en general y el correcto lavado de manos”, subrayó.
Amplió que la bacteria también puede depositarse en los pliegues de la piel. “Por ejemplo, en pacientes que sufren algún tipo de afección o alguna enfermedad crónica, o está inmunodeprimido, como por un ejemplo una persona con diabetes, puede aparecer en la piel dando una erisipela. Esto también es frecuente en nuestro medio digamos. Y en todos los casos se trata con antibióticos, esa es la facilidad que tiene el tratamiento”, dijo.
Explicó que una vez detectada la bacteria, cosa que se hace a través de un hisopado faríngeo, se aplica un tratamiento con penicilina o cualquier derivado, como por ejemplo, la amoxicila, medicamentos que tenemos en el país y en Tucumán, y que es accesible.
Admitió, no obstante, que la enfermedad puede agravarse en casos de pacientes que presenten algún tipo de inmunocompromiso. “Puede dar un tipo de shock séptico, pero en pacientes que ya tienen un antecedente, una conmorbilidad, entonces es como que la bacteria se aprovecha de esa inmunidad baja”, explicó.
Diferencia con los virus
La doctora Villagra comentó que en esta época lo que más suele verse en la consulta médica son cuadros de anginas virales. “Pero si el paciente tiene antecedentes, se puede hacer el hisopado faríngeo para confirmar o descartar que se trate de un cuadro bacteriano. Y, una vez diagnosticado, es fácilmente tratable”, reiteró.
Advirtió, asimismo, que hay que tener cuidado, porque si se trata de un cuadro viral no se trata con antibiótico. “A a veces son anginas virósicas mal tratadas, porque dan antibióticos y así se genera una resistencia bacteriana en la población. En estos casos de los virus hay que darle al paciente analgésicos, antipiréticos, dipirona, pero no antibióticos”, destacó.
Por supuesto, resaltó la importancia de no automedicarse ni medicar a los niños y de concurir a la consulta médica ante los primeros síntomas de fiebre o dolor de garganta.
El caso del Kun Agüero
Consultada sobre el caso del futbolista Sergio Leonel Agüero, conocido como “Kun”, a quien le surgió un problema cardíaco vinculado con un cuadro de estreptococo mal curado, la médica explicó que se puede haber consecuencias a nivel cardíaco o renal.
“Generalmente, estas anginas producidas por este grupo del estreptococo (pyogenes) pueden tener algún tipo de afectación renal o cardíaca y dar una miocarditis. No sé exactamente en el caso de este jugador cuál habrá sido exactamente tipo de estreptococo que lo atacó. Porque también tenemos el estreptococo tipo b, del que suele hacerse una pesquisa en todas las pacientes embarazadas para evitar contagios durante el parto”, detalló.
Agregó que en la provincia se cuenta con los elementos para hacer los análisis correspondientes para determinar si una afección se debe al estreptococo A o al B, y reiteró que ambos se tratan con antibióticos derivados de la penicilina. “Y para las personas alérgicas a la penicilina hay otras alternativas que también funcionan muy bien”, finalizó.
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