El ayuno intermitente puede ayudar a bajar de peso a diabéticos, dicen especialistas

Por sus posibles beneficios para la pérdida de peso, por la aparente simpleza en su realización y por el potencial provecho para la salud, el ayuno intermitente es un modo de alimentarse que ha se ha popularizado en este último tiempo. Aunque todavía su realización y sus efectos son discutidos, cada día nuevos estudios confirman y rebaten argumentos sobre esta dieta. Ahora, un nuevo trabajo dice que el ayuno intermitente podría ayudar a que personas con diabetes tipo 2 pierdan peso.

Se trata de una investigación llevada a cabo por expertos de la Universidad de Illinois, Chicago (Estados Unidos), publicado hace días en la revista Jama Network Open.

El estudio -hecho sobre 75 pacientes- demostró que aquellos que solo comían entre las 12 y 20, todos los días, perdieron más peso que aquellos que redujeron sus calorías en un 25%. “Es importante ofrecer a las personas con diabetes tipo 2 más de una estrategia para perder peso y disminuir su HbA1C”, aseguró Krista Varady, profesora de Nutrición en esa casa de estudios, e investigadora principal del trabajo. Habla del hbA1C (el nivel de glucosa en azúcar durante los últimos tres meses), porque con el trabajo también se demostró que el nivel de azúcar disminuyó un 1% en tres meses.

Pero es importante aclarar, el resultado fue el mismo para aquellos pacientes que redujeron sus calorías un 25%. ¿Por qué es clave el dato del azúcar? “Algunos medicamentos para la diabetes tipo 2 bajan el azúcar en sangre y necesitan tomarse con alimentos”, explicó Varady. Encontrar alternativas para la reducción del azúcar, entonces, podría ayudar a que las personas disminuyan con diabetes disminuyan su ingesta de medicamentos.” Las personas con diabetes tipo 2 generalmente tienen que aumentar su medicación a lo largo de su vida, a menudo tomando tres medicamentos orales a la vez, ya que la mayoría de los medicamentos disminuyen la HbA1C solo un poco”, señaló.

Sobre el trabajo

Pero vamos por partes. El estudio dividió a las 75 personas en tres grupos: uno realizó el ayuno intermitente, otro redujo un cuarto su consumo de calorías, y el tercero no modificó de ninguna manera su dieta. Los dos primeros grupos tuvieron un descenso del 1% en el azúcar en sangre, pero los que hicieron ayuno intermitente mostraron un mayor descenso de peso.

“Algunas personas encuentran difícil contar calorías. Otras no tienen apoyo semanal o mensual y necesitan un patrón dietético que sea simple de seguir, como mirar el reloj”, agregó Varady, para justificar los alcances del estudio. Sin embargo, la especialista dijo que esto es solo una prueba de concepto que muestra que el ayuno intermitente es seguro para diabéticos tipo 2, pero que hacen falta más estudios.

Este -advirtió la profesional- es el primer estudio en su tipo. Ahora bien -también aclaró- los pacientes con diabetes deberían consultar con su médico antes de aplicar este tipo de dietas.

Con precaución

Esto último también lo remarca la nutricionista tucumana Julieta Espeche. “Cada vez que iniciamos un cambio en nuestra alimentación, si no somos rigurosos con el control y con el acompañamiento profesional, podemos tener efectos rebote no deseados; es por ello que tanto la restricción de alimentos y nutrientes, como la reincorporación de ellos, debe ser forma progresiva -explicó-; el ayuno sí ayuda con el descenso de peso, pero lo importante al iniciarlo es estar acompañado por un profesional de la salud, con el cual se planteen y determinen objetivos claros. No es un tipo de alimentación que se pueda sostener en tiempos prolongados. Por esto es importante que haya objetivos claros”.

Sí es posible que el ayuno ayude al descenso de peso en pacientes, en este caso, con diabetes, “siempre que esté determinado por alimentos ricos en proteínas y bajos en hidratos -resaltó-; también ayudará a los niveles de azúcar en sangre y tendrá mejoras en los indicadores de laboratorio en general”.

Atención...

Pero claro, el ayuno debe estar controlado por profesionales. “En general la población realiza dietas de moda sin control ni seguimiento adecuado, lo que puede generar alteraciones metabólicas que pueden modificar negativamente las condiciones normales de una patología de base, como la diabetes”, indicó.

Eso explica por qué la medicina es tan cautelosa al hablar de este tipo de procedimientos. “No hay que demonizar ninguna práctica alimentaria; debemos hacer educación alimentaria consciente; plantear objetivos posibles, medibles y que sean factibles para el individuo en particular”, aseguró y advirtió: “no es una solución mágica; es cambiar los hábitos alimentarios con objetivos claros y trabajar en ello”.