El ex presidente de Estados Unidos, Donald Trump, declaró este lunes ante el juez Arthur Engoron en calidad de testigo por presuntas maniobras para acrecentar el valor de sus activos y beneficiar a la Organización Trump.
Durante la audiencia que se desarrolló en la ciudad de Nueva York, el magnate republicano desestimó las acusaciones de que las declaraciones de la situación financiera de la compañía eran fraudulentas para engañar a entidades financieras y aseguradoras y obtener créditos y pólizas ventajosos.
También dijo que "en realidad no eran documentos a los que los bancos prestaran mucha atención".
Antes de subir al estrado, Trump habló con los periodistas fuera de la sala del tribunal, arremetió nuevamente contra la fiscal general de Nueva York, Letitia James, que reclama U$S250 millones de multa, y denunció el caso como una "interferencia electoral".
"Es una situación muy triste para nuestro país". "Suele tener lugar en países del tercer mundo y repúblicas bananeras", agregó Trump.
Contra los jueces
Tanto James como Engoron son blanco de la ira del republicano desde que se inició este juicio a principios de octubre. El magistrado ya le ha impuesto dos multas, de 5.000 y 10.000 dólares, al dictaminar que la ex estrella de reality shows había violado una orden de silencio impuesta después de que arremetiera contra la secretaria judicial en las redes sociales y en declaraciones a la prensa afuera de los tribunales.