El alfarismo definió sus nombres para la Legislatura y un radical propuesto para controlar los servicios públicos

Puja opositora por la Legislatura

Los cinco legisladores que conformarán el bloque alfarista en la Cámara acordaron finalmente los roles que ocuparán cada uno. En una cena de la que participó el intendente Germán Alfaro, se resolvió que propondrán a Alfredo “Freddy” Toscano para la vicepresidencia segunda de la Legislatura. En tanto, Claudio Viña (Nueva Fuerza) será el presidente del bloque y Rolando “Tano” Alfaro, el vice. La bancada del Partido por la Justicia Social se completa con Rodolfo Ocaranza y con Walter Berarducci. Ocaranza se sentaría en dos comisiones estratégicas: Asuntos Constitucionales y Juicio Político.

Las definiciones en el alfarismo tienen relevancia en virtud del acercamiento político con el oficialismo provincial. Este acuerdo posibilitó que haya un representante del PJS en la mesa de conducción del Concejo Deliberante de la capital (Carlos Ale, como vicepresidente segundo) y todo indica que se repetirá la estrategia en la Legislatura, pese al rechazo del radicalismo. Ocurre que la UCR cuenta con seis bancas frente a las cinco del PJS, y ya le planteó al vicegobernador electo, Miguel Acevedo, que ese lugar entre las autoridades le corresponde.

Otra propuesta de Jaldo a la oposición

El gobernador electo, Osvaldo Jaldo, mantiene firme su intención de dotar de transversalidad a la gestión que comenzará este domingo. Así, al nombre de Federico Masso como ministro de Desarrollo Social; al de Raúl Albarracín (secretario de Gobierno); Juan Casañas (Idep) y a los acuerdos con el alfarismo podría sumarse un acercamiento con el radicalismo. Puntualmente, trascendió que el tranqueño le ofreció al legislador saliente José Ricardo Ascárate un lugar en el directorio del Ente Regulador de los Servicios Públicos de Tucumán (Ersept). Si bien en un principio está acordado su desembarco (los tres miembros del directorio son propuestos por el Poder Ejecutivo) todo está supeditado a la postura que asuma la UCR en la nueva composición legislativa, teniendo en cuenta que aún puja por un lugar en la mesa de conducción de la Cámara.