El operativo "Regreso Seguro" comenzó este jueves con la evacuación de un primer grupo de 49 argentinos, incluyendo a cuatro niños, desde Israel. Estos compatriotas fueron trasladados a la ciudad de Roma, Italia, desde donde emprenderán su regreso a Argentina en las próximas horas. El objetivo principal es repatriar a los argentinos en el menor tiempo posible.
El rescate se hizo a bordo de un avión C-130 Hércules de la Fuerza aérea Argentina.
Cómo es el avión Hércules que se utiliza para repatriar argentinos
El avión C-130 Hércules, fabricado por Lockheed Martin en los Estados Unidos, se ha convertido en un elemento fundamental en la misión de rescate de argentinos en Israel. Este robusto y versátil avión de transporte militar ha servido a la Fuerza Aérea Argentina durante más de medio siglo y ha demostrado ser una herramienta invaluable en diversas situaciones.
Este avión es conocido por su capacidad de transportar tropas, personal y equipos, siendo una pieza clave en operaciones militares. Puede llevar una carga de más de 11,000 kilogramos y ofrece un amplio compartimiento de carga que se adapta a diversas circunstancias. Este avión ha sido empleado en todo el mundo, desde lanzamientos de tropas paracaidistas hasta servir como estación meteorológica.
Sin embargo, en la situación actual, el C-130 Hércules se ha transformado en un valioso recurso de rescate, capaz de aterrizar en pistas cortas de aproximadamente 1300 metros de superficie terrestre. Aunque no cuenta con las comodidades típicas de un avión de transporte de pasajeros, tiene todas las capacidades necesarias para enfrentar vuelos en circunstancias críticas, como las que se presentan en estas operaciones de rescate de argentinos que escapan de la guerra en Israel.
La historia del Hércules en Argentina
El C-130 Hércules se incorporó a la Fuerza Aérea Argentina en 1968, y desde entonces ha desempeñado un papel destacado en diversas misiones. En 1970, aterrizó en la base Marambio en la Antártida argentina, demostrando su capacidad para operar en algunas de las condiciones climáticas más extremas del planeta.
Además, el C-130 Hércules participó en la Guerra de Malvinas como avión reabastecedor en vuelo para los aviones de combate, contribuyendo a las operaciones contra la flota británica. Su versatilidad y capacidad de respuesta lo convirtieron en un activo invaluable en este conflicto.
Argentina hoy cuenta con siete aeronaves de estas características en su flota.
La flota de C-130 Hércules en Argentina ha sido mantenida y reparada en cinco unidades en la Fábrica Argentina de Aviones (FADEA) "Brigadier San Martín", ubicada en Córdoba y dependiente del