Por Alicia Liliana Fernández
07 Octubre 2023
MARCA REGISTRADA. Nicolás y su orgullosa tonada cordobesa.
En todo tiempo, y más en tiempos electorales inquietantes, el humor es el remedio. Lo sabe y lo administra Camilo Nicolás, que viene de la “república de Córdoba” con su unipersonal “Tranqui Piola”, hoy, a las 21.30, en el teatro Alberdi (Jujuy y Crisóstomo Álvarez).
- ¿Vos sos el que está tranqui piola, o querés evangelizar al público?
- Lejos de estar tranqui piola ¡ja ja ja ja ja!, pero así intento tomarme las cosas. Uno siempre quiere conquistar al público. Para mí cada subida al escenario es un desafío, un momento para mostrarle al espectador que todo absolutamente todo valió por la alegría.
- ¿Cómo definís el tipo de humor que hacés?
- Lo definiría como humor espontáneo. Mi show se caracteriza por la identificación del público con lo que cuento en mis monólogos, y también tiene mucha interacción. Eso es lo que subo en mis redes (instagram: @camilonicolasok). Yo digo que mi show es como un asado entre amigos donde nos reímos de nosotros mismos. La fórmula sería como un buen fernet: 70/30, o sea 70% guionado y 30% improvisado.
- ¿Qué temas tratás en el show?
- Hablo de todo lo que me atraviesa: obviamente todo un poquito de la pospandemia y de cómo cambiaron las reglas de juego; después hablo de situaciones vergonzosas que me han pasado, y el público participa activamente. Luego, de las inseguridades, porque aunque pueda subirme a un escenario y hacer un show, soy muy introvertido y vergonzoso en mi vida personal. Y por último hablamos de la paternidad y la maternidad; sobre todo del lado B, porque el lado A todo el mundo lo conoce, pero acá nos damos el espacio para la catarsis.
- ¿En qué dialecto? ¿Cordobés de Córdoba Capital, de Traslasierra, de la región serrana o una mezcla?
- Creo que tengo un poquito de todo. La tonada la llevo como una marca registrada, como diría el gran Rodrigo. Un rasgo saliente mío es la tonada bien marcada. Por un lado es un plus, y por otro una responsabilidad muy grande ya que el cordobés tiene la obligación de ser gracioso, y en mi show lo doy todo para que el/la espectador/a vuelva a su casa con la mandíbula acalambrada de la risa.
- En fin, ¿hablás más o menos cordobés que Juan Schiaretti, como para ubicarte mejor en la tonada?
- El Gringo tiene la tonada rara; hace como un cantito raro… ¡ja jaja! Mi tonada es BIEN CORDOBESA. No existe posibilidad alguna de que piensen que soy de otra provincia.
- ¿Cómo es tu proceso de creación de cada show? ¿cómo te inspirás?
- La inspiración me surge en todo momento: en un asado, en una charla con amigos, en la calle viendo la gente... cualquier lugar es bueno para que la lamparita se encienda. Tengo un grupo de WhatsApp conmigo mismo, donde voy recolectando ideas, frases y momentos que me sirven de inspiración para escribir. Hoy estoy en ese momento de creación; largo todo sobre la compu, pongo musiquita y empiezo a escribir.
- ¿Vos escribís el texto?
- Sí, absolutamente todo. No tengo guionista. Siento que si no lo escribo yo no puedo sentirlo, y todo lo que se en el escenario o me pasó o lo inventé, pero lo viví. De hecho la gran virtud del show es la credibilidad de lo que cuento, y de cómo reacciono cuando el espectador me cuenta algo.
- ¿Cómo vienen tu carrera y tu vida?
- Gracias a Dios, los últimos tes años han sido de mucho trabajo: me sumé a la compañía de Pedro Alfonso (“Una noche en el hotel” y “Un plan perfecto”) tanto en temporada como en la gira anual. En paralelo hice mi unipersonal “Tranqui Piola”... ¡Más la llegada de Lolito a la familia, mi segundo hijo! Han sido años muy intensos, muy disfrutables también. Agradezco mucho mi presente, profesional y personal.
Lo más popular
