El infiltrado de River rompió el silencio: la frase que desató la golpiza en La Bombonera

El infiltrado de River rompió el silencio: la frase que desató la golpiza en La Bombonera

José tiene 58 años, es hincha del "Millonario" y logró meterse en una tribuna de Boca para ver el Superclásico y acompañar a una amiga de Misiones.

José tiene 58 años, es hincha del Millonario y logró meterse en una tribuna de Boca para ver el Superclásico. GENTILEZA TN José tiene 58 años, es hincha del Millonario y logró meterse en una tribuna de Boca para ver el Superclásico. GENTILEZA TN
03 Octubre 2023

Boca cayó por 2-0 ante River como local en el marco de la séptima fecha de la Copa de la Liga Profesional y, en la popular principal de La Bombonera, los hinchas detectaron la presencia de un infiltrado del conjunto de Núñez y lo golpearon sin parar. Las imágenes tuvieron mucho impacto y se viralizaron el las redes sociales.

En la popular principal del estadio Alberto J. Armando, los simpatizantes del Xeneize descubrieron a un hincha de River entre ellos y le dieron una golpiza que hizo que el infiltrado sea retirado en camilla de la tribuna.

El infiltrado de River rompió el silencio: la frase que desató la golpiza en La Bombonera

El infiltrado de River en La Bombonera rompió el silencio

“Una amiga que es hincha de Boca vino a visitarme y la invité a ir a la cancha. No tenía entrada, pero nos metimos en el segundo tiempo después de burlar a la seguridad del estadio”, comenzó relatando José, de 58 años, y revelando que acompañó a una amiga de Misiones para que sienta lo que es vivir un Superclásico.

“Hay un infiltrado, hay que matarlo”, fue la frase que escuchó antes de los golpes. “Estábamos atrás del arco de Boca y uno de los hinchas me sacó la bufanda que tenía en el cuello y me vio el tatuaje de River. Ahí gritó que era un infiltrado y llegaron como 50 personas a pegarme”, señaló en diálogo con el portal TN.

Y además agregó: “Me empujaron y me empezaron a pegar. Cuando caigo me golpeo la cabeza contra los escalones de material y pierdo la consciencia por unos instantes. Los golpes no paraban”, afirmó.

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