Hace mucho tiempo que se habla de la posibilidad de que haya de vida extraterrestre, pero hasta el momento no hay pruebas científicas de su existencia.
La vida extraterrestre se refiere a vida originada fuera de la Tierra. Podría ser en la Luna, en otro planeta del Sistema Solar, en un planeta extrasolar (planeta que no forma parte del Sistema Solar) o en otra galaxia. La vida extraterrestre podría ser vida inteligente o no (animales, plantas, microorganismos, etc.).
La búsqueda de vida no es sencilla. Para buscar animales, plantas o aun microorganismos es necesario ir al lugar. El hombre solo ha llegado a la Luna y algunas naves pudieron traer muestras de Marte y algún asteroide. No tenemos telescopios suficientemente grandes en Tierra como para ver, algún tipo de vida en la Luna, que es el objeto más cercano en el que se podría buscar. Ni los telescopios espaciales podrían verla. Si fuesen microorganismos podrían estar en material traido de otros lugares, como el que recientemente se trajo del asteroide Bennu.
Para buscar vida inteligente hay otras herramientas, porque lo que se busca en este caso, son señales que podrían haber sido originadas por seres inteligentes en algún lugar del universo. Se piensa que podrían ser ondas electromagnéticas y ellas se pueden buscar con radiotelescopios como las señales de radio y TV que se originan en la Tierra. El proyecto SETI (Search for Extra Terretrial Intelligence), iniciado en la década de 1970 por Carl Sagan y apoyado por la NASA, fue planeado para buscar vida inteligente. En este proyecto, que sigue vigente, participaron y participan un gran número de radiotelescopios y se trata de descifrar señales que puedan se originadas por seres inteligentes. La dificultad que hay es que las señales electromagnéticas que viajan por el espacio, como las de radio, TV, telefonía celular, entre otras, se envían encriptadas y para poder interpretarlas hay que saber cómo se encriptaron. Este proyecto tuvo una parte muy original y fue SETI@HOME. En él podía participar cualquier persona con una computadora, con una conexión a INTERNET y contribuía analizando señales recibidas por el telescopio de Arecibo (Puerto Rico). Este proyecto se canceló en el 2020, cuando colapsó la antena de ese radiotelescopio. Hasta el momento, a pesar de todas las observaciones que se hicieron y todas las señales que se analizaron, no se pudo encontrar ninguna señal inteligente.
Hay muchos sistemas planetarios similares al Sistema Solar. Para que exista vida en un planeta, este debe estar a una distancia de la estrella tal que su temperatura sea compatible con la vida. Además debe ser sólido y debería tener agua líquida, atmósfera y algunos componentes químicos en ella como Carbono y Oxígeno.
Frecuentemente aparecen noticias respecto al descubrimiento de un planeta con algunas de estas características. La más impactante fue el descubrimiento de un planeta que tendría océanos de agua y carbono en su atmósfera, que se realizó con el telescopio espacial James Webb (JWST). Ninguno de esto descubrimiento garantiza que en esos planetas haya vida, pero si indican en qué lugares es más conveniente buscar.
Hay que aclarar que se busca vida similar a la que existe en la Tierra. Muchos dicen que se debería buscar otro tipo de vida, pero no se sabe qué otro tipo de vida podría existir y no se puede buscar lo que no se conoce.
Como se dijo al comienzo, todavía no se ha encontrado vida extraterrestre, lo que no significa que no exista. La mayor parte de los científicos creen que hay vida en algún lugar del Universo, pero para que sea aceptado, se necesitan pruebas que cumplan con los protocolos requeridos por la ciencia. El encontrarla, probablemente, es sólo cuestión de tiempo.