El papa Francisco se emocionó cuando la fotógrafa de la agencia Reuters Yara Nardi le mostró la foto de un niño migrante durante su vuelo a una conferencia de la Iglesia sobre asuntos mediterráneos en Marsella, Francia.
Nardi, que viajaba con el pontífice, le mostró la foto de gran tamaño durante el vuelo desde Roma el viernes. "Se emocionó inmediatamente, en cuanto la saqué del sobre", contó la mujer, y agregó que Francisco comentó: "Los retienen en campos de detención libios y luego los arrojan al mar".
Impedir rescates en el mar es un acto de odio, dijo el Papa
La foto -que Nardi había tomado la semana anterior en la pequeña isla italiana de Lampedusa- es un primer plano de los ojos de Prince, de 18 meses, un niño que acompañado por su madre Claudine Nsoe había llegado desde Camerún junto a otros miles que arribaron en las últimas semanas por mar desde el norte de África.
"Me dio la mano y se quedó con la foto", relató.
El sábado en Marsella, el papa Francisco condenó los "nacionalismos beligerantes " y pidió una respuesta paneuropea a la migración para evitar que el Mediterráneo, donde miles de personas se han ahogado, se convierta en "tumba de la dignidad".
Nardi contó que el día antes de viajar con Francisco estaba poniendo en orden su archivo fotográfico, como suele hacer antes de sus encargos. "Vi la foto que había tomado en Lampedusa y de repente sentí que tenía que enseñársela al Papa", dijo.