"Vino la creciente y se los llevó". Las lágrimas brotaban sin cesar de los ojos de Domingo Avelino González. El hombre tuvo que ir anoche a reconocer en la morgue judicial el cuerpo de su mujer, Gladys Estela Morales, quien desapareció junto a su hijito Leandro, de 5 años, ayer poco después del mediodía, en El Siambón.
Cuando la familia decidió ir a pasar el día y a comer un asado junto al río, no se imaginó que la furia de la naturaleza le asestaría semejante mazazo. Habían viajado desde Alderetes para huir del calor de la ciudad. "Yo estaba al lado del auto. Le dije ?andá a hacer la ensalada?. ?No, quiero mostrarle el agua al chiquito?, me contestó". González no podía dejar de recordar las últimas palabras que intercambió con su esposa.
Gladys, de 45 años, fue encontrada después de las 19, a 500 metros del puente sobre el río Lules, cerca de la quebrada. Su cuerpo, desnudo, estaba enredado entre las ramas. El niño no había sido hallado hasta anoche.
"Esta mañana me dijo, ?yo te quiero mucho, papá?. Estaba contento porque este año iba a empezar el jardín de infantes", dijo González, con las esperanzas ya perdidas de encontrar a su hijo con vida.
La mujer no fue la única víctima de la tremenda tormenta. Anoche se informó de otra muerte. Luis Castillo, de 32 años, caminaba por avenida Roca al 400, de Tafí Viejo, cuando un cable cortado lo electrocutó.
La furia de la naturaleza
La mortal tormenta que se abatió ayer sobre toda la provincia es el centro de un gigantesco fenómeno que cubre el oeste de Santiago del Estero, toda la provincia de Catamarca y el sur de Salta. En menos de una hora, además de llevarse a la mujer y a su hijito, volteó decenas de árboles, inundó calles y barrios enteros, dejó a varios miles de personas sin luz y a un millar de evacuados. El viento, que superó los 53 kilómetros por hora en la ciudad, duplicó su fuerza fuera del ámbito urbano. En menos de una hora, cayeron 20,5 milímetros de agua, informó Juan Minetti, director del Laboratorio Climatológico Sudamericano.
El noroeste de la capital tucumana sufrió una intensa lluvia de granizo. En esa zona, el agua entró en las casas, hubo voladuras de techo en la zona del Canal Norte y en Bulnes al 1.100, entre otras zonas.
La temperatura bajó más de 10 grados en pocos minutos (de 36.4º C a menos de 25º C). Para hoy se esperan nuevas tormentas, dijo Minetti.
Hay entre 800 y 1.000 personas evacuadas
Serían entre 800 y 1.000 los evacuados en toda la provincia, concentrados, en su mayoría en la capital. En el complejo Ledesma había 170 personas; en el albergue Fierro, 80. La escuela 240 albergaba a 60 personas, y en la capilla de Francisco de Aguirre al 2.800 había otras 40. También la escuela Justiniano Frías y el jardín Abejitas funcionaron como albergues para los que se quedaron sin techo.
Los asistidos pertenecen a los barrios Oeste II, canal Norte, El Chivero, San Ramón, entre otros, según informaron el titular de la Dirección de Emergencia, Juan Masaguer, y Gregorio Alvarez, de Defensa Civil Municipal. Además, hubo evacuados en San Pablo y en San José.
Vecinos huían de sus casas y el Siprosa buscaba vacunas
En sólo 20 minutos, dos familias lo perdieron todo
Susana Lobo y sus cinco hijos lo perdieron todo. El viento y la lluvia se llevaron las cuatro chapas que cubrían su pequeña casa de Pasaje García al 1.500. "No nos dio tiempo para nada. Fue todo muy rápido", contó entre sollozos. Al igual que Elvira Garzón, quien vive a unos metros de distancia, debieron abandonar sus viviendas.
El corte de luz puso en peligro miles de vacunas
La falta de energía eléctrica puso en peligro las miles de dosis de vacunas de los Caps de la ciudad. El titular de la Dirección de Emergencia, doctor Juan Masaguer, recorrió los distintos centros de atención primaria de la salud para retirar las dosis y llevarlas al Hospital Avellaneda.
Un pino se desplomó sobre su auto y casi lo mata
José Galarce recordará la tormenta de ayer por muchos años. Estaba en su auto cuando comenzó a correr un fuerte viento. Apenas entró en su casa de Santo Domingo al 500, un pino de 20 metros cayó sobre su vehículo. "Fueron dos segundos de diferencia los que me permiten contar esta historia", relató.
A 10 cuadras del centro, hubo un metro de agua
Nelsa Acosta vive sobre la avenida Juan B. Justo, a sólo 10 cuadras de plaza Independencia. Y aunque parezca insólito, soportó un metro y medio de agua. "La Municipalidad no nos escucha. Si se hubieran limpiado los colectores, las inundaciones no habrían sido de esta magnitud", remarcó.
La caída de postes causó pánico entre los vecinos
En Bulnes al 1100 se cayeron dos postes de luz y dos árboles de gran porte. "Podría haber sido una tragedia, pero por suerte no le pasó nada a nadie. Tampoco había autos estacionados, así que no hubo accidentes", contó una vecina, que observaba atónita los daños provocados por el meteoro.
Cayó en un canal y fue arrastrado cuatro cuadras
El agua lo arrastró cuatro cuadras hasta que cayó en el canal que pasa por debajo de la vía, en Muñecas y Perú. El auto de remisero Luis Ricardo Trejo, con el adentro, estuvo 10 minutos bajo el agua, hasta que varios hombres y una grúa lograron sacarlo. "No podía abrir la puerta por la fuerza de la correntada", agregó Trejo.
La corriente inundó casas en Venezuela al 1.500
Las viviendas ubicadas en Venezuela al 1.500 fueron castigadas por la correntada. Oscar Nieto aseguró que cada vez que llueve en su zona deben soportar las inundaciones. "Las cloacas son obsoletas y la Municipalidad no pasa las máquinas por las calles", se quejó mientras sacaba el agua de su casa.
EN EL OESTE Y EL NORTE DE CAPITAL
Se quedaron sin agua y a oscuras
A las 16, las zonas oeste y norte de la capital quedaron a oscuras y sin agua. La falta de respuestas desde EDET fue una constante. El director de Emergentología del Siprosa, Juan Masaguer, lo sufrió en carne propia. "Fui hasta la empresa y nadie me pudo informar nada; algo insólito, porque no teníamos luz en hospitales", se quejó.
El gerente general de EDET, Günter Hoffman, sólo explicó que el viento cortó líneas que abastecen a los distribuidores de energía. Por su parte, el titular de la Sociedad Aguas del Tucumán (SAT), Alfredo Calvo, explicó que la falta de agua se debe a que si no hay electricidad los pozos surgentes se paralizan.
ESTADO DE LOS CAMINOS
Las rutas están transitables
El fuerte viento y la lluvia tornaron intransitables rutas y calles por varias horas. Desde Vialidad Provincial informaron que la 307, que comunica con los Valles Calchaquíes, sufrió desmoronamientos en varios tramos. El más significativo tuvo lugar en el kilómetro 26, donde personal vial trabajaba anoche en la limpieza. El Camino del Perú fue uno de los pasos más afectados, con varios árboles y postes de luz caídos.
El informe de Vialidad indica que todas las rutas y caminos provinciales se encuentran transitables, aunque recomendaron hacerlo con precaución por la posibilidad de que se produzcan nuevas precipitaciones.