Luego de mucha espera, Pixar estrenó su nueva película animada en Disney+. Se trata de Elementos, una producción donde se combinan historias de inmigrantes, romanticismo y da lugar a la fantasía. La película es un éxito en la plataforma y promete seguir aumentando espectadores.
Todo transcurre en Element City, una ciudad con enormes torres hechas de vidrio templado a fuego, nubes y trenes que andan sobre rieles que salpican agua, y donde habitan personas hechas de cuatro elementos: Agua, Tierra (o árboles), Aire (o nubes) y Fuego. Los últimos también fueron los últimos en inmigrar, y no se han asimilado por completo a la ciudad.
Respecto a los Fuego, hay un prejuicio sobre ellos, pero lo cierto es que pueden evaporar a los de agua si toman contacto con ellos, y quemar a los que son árboles. Algo similar sucedía en Zootopia, de Disney, o en los mismísimos X-Men: el miedo o el desconocimiento de lo diferente no aúna, sino que divide y segrega.
Una historia de familia que cautiva a los espectadores
Bernie y Cinder Lumen abren su propio negocio, y allí junto a la llama azul que trajeron de Tierra del fuego, crían a Ember, con la esperanza de que herede el negocio familiar.
A los quizá muchos temas que aborda el filme de Peter Sohn (el director de Un gran dinosaurio) se suma el dilema de seguir el mandato familiar y/o el sueño propio, el de la carrera que desea perseguir. En el caso de Ember, ser artista.
Pero allí está la fuerte y cariñosa relación padre-hija, con la idea de que Ember se haga cargo del local cuando el padre se jubile. Pero Ember tiene mal genio, y entra en llamas cuando se enoja. Y a partir de un enojo es que se inunda accidentalmente el sótano del negocio y allí aparece un personaje de agua, Wade, que resultará el interés romántico.
Wade es inspector del municipio, y aunque la multa, luego intentará subsanarlo para que el local no sea clausurado.
Hay una fisura que permite que el agua llegue al gueto de los de Fuego, y esa grieta en un dique que contiene el agua es otra metáfora más de las muchas que ofrece Elementos.
La película tiene abundantes cuotas de humor, gráfico y en los diálogos, desde la ola que hacen los personajes de agua en un estadio a las confusiones del padre de Ember, que no termina de aprender a hablar el idioma de la ciudad.
El filme animado se puede ver en todo el mundo a través de Disney+.