Vuelve el Espacio DAR a Tucumán: qué ver en la esperada muestra de diseño y arquitectura

Renovado, actualizado y a la vanguardia. Así es como vuelve Espacio DAR tras una década de pausa. La muestra de interiorismo, arquitectura y paisajismo más grande del NOA nos trae en su décima edición muchas propuestas y tendencias infaltables a la hora de construir y remodelar. Si bien han cambiado algunas premisas desde la primera exposición en casa Alberdi en el año 1999, se mantiene la esencia de difundir y expandir el diseño en la región visibilizando el potencial creativo de los profesionales del medio.

Una de las novedades de esta edición 2023 es que no se ha remodelado una construcción emblemática de la provincia -como fue costumbre en las muestras anteriores-, sino que por primera vez el concepto se desarrolló en un edificio nuevo de la ciudad de Yerba Buena.

Se mantiene intacto también el espíritu solidario del evento, ya que lo recaudado de la venta de entradas es a beneficio de la Fundación de Ayuda al Niño Necesitado (FANN).

LA GACETA habló con el director de Espacio DAR, Omar Farhat, que nos dio una serie de definiciones sobre los objetivos y la esencia de este evento.

- ¿Qué te impulsó a elegir este año para volver con la exposición tras una pausa de una década?

- Fue por una cuestión de presupuesto y por no haber encontrado la locación adecuada. Si bien seguimos haciendo acciones referidas al diseño, esta es nuestra muestra máxima que se realiza una vez cada dos años. Desde la fundación de Espacio DAR hemos trabajado para cumplir un proyecto ambicioso, pero no imposible. Finalmente este año pudimos encontrar este predio. Es un edificio en construcción, de líneas contemporáneas, de planta libre y fácilmente recorrible.

- En años anteriores el proyecto partía de la remodelación de alguna casa antigua emblemática de la provincia ¿En que se basó la decisión de modificar ese concepto y de qué manera suma a la muestra?

- Es una propuesta distinta que tiene cosas positivas y negativas. Por supuesto que siempre nos gusta revalorizar edificios históricos que puedan quedar para la sociedad, pero nos pasó que recuperamos construcciones muy importantes en ocasiones anteriores y después igualmente terminaron demoliéndolas. Es una cuestión de azar.

Además, las propiedades a intervenir tienen que cumplir muchos requisitos: una cierta cantidad de espacios, tienen que estar bien ubicadas porque si es lejos la gente no va, como ya nos ha pasado en el Ingenio San Pablo o en El Corte. Este año, elegir un edificio nuevo nos dio la libertad para poder desarrollar los proyectos de interiorismo y paisajismo con espacios más amplios que no tienen la estructura de una cocina, un baño, un dormitorio o la escalera de una casa. De esa manera se logró una exposición mucho más creativa y con la versatilidad necesaria para generar una muestra dinámica.

Hemos totalizado 38 ambientes intervenidos por arquitectos, interioristas, paisajistas, galeristas y artistas, diseñados desde cero en su totalidad y que pueden lucirse mucho más gracias a las dimensiones generosas de los espacios. La exhibición no tiene un valor comercial. Un local o una marca no podían exhibir su stand de cualquier manera, sino que fue todo diseñado hasta en el último detalle. De cualquier modo, siempre estamos abiertos a nuevas propuestas.

- ¿Qué es lo que más ha cambiado desde el último Espacio DAR hasta hoy en términos de diseño?

- Cambió muchísimo porque hay una gran variedad de materiales nuevos, sobre todo en iluminación. La tecnología LED avanza sin parar y es muy importante porque tiene que ver con el bajo consumo y la sustentabilidad, que es una de las premisas de la exposición. También han surgido revestimientos, placas y piedras naturales que antes no conocíamos. En los espacios de la muestra se los puede ver.

-¿De qué premisa partieron los expositores para realizar sus creaciones?

- De reglas básicas de convivencia. como respetar algunos lineamientos que tienen que ver con aberturas y otras cosas a fin de mantener la estética del edificio. Eso no se podía modificar, pero en general no hubo ningún tipo de limitación.

-¿Cuáles son las tendencias a nivel mundial que se pueden ver plasmadas aquí en la provincia?

- Hay una explosión de color. Después de años de utilizar tonos muy neutros, ahora vienen los colores y las texturas, hay que animarse. Se usan los muebles de colores, los murales y las tonalidades vibrantes por todos lados. De todas maneras, no soy mucho de recomendar tendencias. Me gusta ver lo nuevo y lo que viene, pero trato de no pegarme a las cosas que pasan de moda y desaparecen. Tratamos de poner el sello personal en cada creación y por eso logramos proyectos que se identifican rápidamente.

- ¿Repercute la crisis que atraviesa el país en el diseño?

- Muchísimo. Hay muchos materiales que no se consiguen, hay poco stock, los precios son un disparate. Pero no pasa solo en el diseño, pasa en todo, en la vida diaria.

-¿Qué buscan los tucumanos a la hora de diseñar o construir un espacio? ¿Quieren pertenecer a una moda o buscan diferenciarse?

- Depende, no se puede generalizar. Hay clientes que me piden cosas diferentes y hay otros que no se animan y son más clásicos. Hay de todo, pero sí creo que Tucumán tiene un muy buen grupo de profesionales, de estudios con mucha fuerza, trabajamos todos bien y tenemos un gran semillero. En eso tienen que ver mucho las carreras de Diseño de la Unsta y de la UNT, que fueron de las primeras del país. Este espacio es un buen portal para darle cabida a la gente joven y que pueda mostrar lo que hace.

-¿Qué recomendaciones podrías hacer a alguien que está planeando construir?

- Lo principal es tratar de proyectar hasta el último detalle antes de empezar la obra. Que tenga todo definido aunque todavía no tengan el presupuesto para hacerlo, para que en futuro se vaya haciendo en base a un proyecto.

También es importante buscar la funcionalidad. Si algo no funciona no tiene ningún valor. Ya sea en un local comercial, una casa, una clínica. Por más lindo que sea si no cumple ese requisito no tiene ningún sentido.

- ¿Qué rol tienen los espacios integrados?

- Hoy la gente es mucho más práctica, sobre todo las generaciones jóvenes. Ya no se hace un living para que esté cerrado. Lo primero que se pone en una sala es un gran televisor que le da vida y las personas lo usan de esa manera. No se usan más los espacios que se mantenían bajo llave y se abrían solo para una fiesta o un cumpleaños.

Creo que a la casa hay que vivirla y disfrutarla porque la vida se va y es rápida como para no aprovecharla. Diseñamos con ese concepto.

- ¿Influyen las redes sociales a la hora de intervenir un ambiente o una vivienda?

- Sí, sobre todo en la gente joven. Los clientes llegan con alguna imagen de Pinterest, pero en general el diseño sobrevive a la foto. Hay veces que no se puede lograr tal cual lo que piden porque el espacio no da o porque no tiene nada que ver con el proyecto.

Es necesario hacer entender al cliente que eso no se puede hacer. Está en el profesional tratar de mostrar que es posible hacer algo diferente o mejor que lo que muestra la foto.

- ¿Han tomado protagonismo los espacios abiertos o semi cubiertos tras la pandemia?

- La pandemia fue un antes y un después. Las personas buscan el verde, tener mayor amplitud y todo más iluminado.

- ¿Se puede definir la ciudad de Yerba Buena con algún tipo de estilo?

- No. Está muy mezclado. Yerba Buena ha ido creciendo a pasos agigantados y creo que el municipio no supo ordenar algunos lineamientos de las construcciones. Es una pena, porque si bien creo que está mucho mejor organizado urbanísticamente que el centro, hay muchas cosas que se podrían mejorar. Todo debería pasar por el diseño, desde un cartel de información pública en la peatonal hasta un semáforo o una plaza. Toda la cuadricula de la grilla urbana debería estar absolutamente diseñada y prevista desde acá a muchos años en adelante.

- Así como hay estilos que marcaron décadas anteriores, ¿crees que hay alguna impronta fuerte que vaya a marcar esta época?

- No alguno en particular. Lo que nunca va a pasar de moda es lo racional, lo que es atemporal, las líneas puras, los materiales nobles. Si bien hay tendencias con las que se va jugando por épocas, todo eso no va a pasar de moda nunca.