Una tucumana contó su dura lucha contra la discriminación en Got Talent: “No nos dejan cantar a las trans”

Anoche, en Got Talent, una tucumana se presentó para mostrar sus destrezas artísticas arriba del escenario del reality y reivindicó la lucha contra la discriminación de la comunidad LGBTIQ+. Según contó en la previa a su actuación, vivió un duro episodio un año atrás.

“Vengo a mostrar el arte, el canto folklorico”, dijo la taficeña Eugenia Valdez Ruiz en su presentación. Ante la consulta de la presentadora Lizy Tagliani sobre quién la había inspirado, la tucumana reveló: “Lo estoy haciendo por todas las chicas trans a las que no nos permiten cantar en el escenario”.

“A mí me pasó hace aproximadamente un año y medio, cuando fui a una peña. Todavía no hice el cambio registral. Presente mi documento y me dijeron: ‘no, no podes cantar porque las travas no pueden cantar folklore'”, contó la joven que interpretó Dejame que me vaya de Los Nocheros.

Al momento de subir al escenario, sentenció: “Soy una chica trans. Representando a la comunidad travesti-trans a las que no nos permiten subir al escenario a cantar”. Al finalizar su interpretación, Eugenia contó que tuvo una transición en su tono de voz: “Siempre me dedique al pop lírico. Antes de mi transición era contratenor y ahora pase a soprano”.

A pesar de ganarse los halagos de todos los jurados, y que ninguno le dio una X para cortar su actuación, la joven no logró pasar de ronda en el programa debido a que Abel Pintos y Florencia Peña emitieron votos negativos. “Estoy seguro que vas a envalentonar el espíritu de mucha gente. Sentí que dentro tuyo hay algo que puede trascender”, dijo el cantante.

Una tucumana deslumbró al jurado en Got Talent con una peculiar danza

Cada vez que un tucumano pisó un reality, dejó huella. Desde Marianela Mirra en Gran Hermano, hasta Salustiano Zavalía en La Voz Argentina. Todos fueron capaces de dejar su impronta en los escenarios que ocuparon. Esta vez, en Got Talent, la joven promesa tucumana es Marianella Gómez, una joven de 21 años, bailarina y estudiante de psicopedagogía.

Marianella llegó al escenario con un perfil bajo: lentes, maquillaje simple, peinado sencillo, una remera holgada y un pantalón en colores tierra. “Mi performance se trata de contar un poquito mi historia”, dijo en diálogo con Lizy Tagliani antes de mostrarse ante el jurado.

En su show, al que eligió llamar “El regalo”, Marianella bailó una fusión de malambo con dancehall –género tradicional de música popular jamaiquina que se originó a mediados de los años setenta– y afrodance –cuyo origen se remonta a las tradiciones culturales del continente africano–.